Mezcaleros de Oaxaca y productores de tequila unieron su voz para protestar contra una «usurpación» oportunista de Estados Unidos, que implementó una categoría de bebidas denominada «Agave Spirits».
En un escrito dirigido a Graciela Márquez Colín, secretaria de Economía del Gobierno Federal, la Asociación Nacional de Denominaciones de Origen (ANDO), presidida por Ramón González Figueroa – quien a su vez es presidente del Consejo Regulador del Tequila – y por el secretario de la asociación, Hipócrates Nolasco Cancino – también presidente del Consejo Regulador del Mezcal – , pidió al gobierno mexicano tomar cartas en el asunto, pues afirmó que esta clasificación en Estados Unidos va a obligar a que cualquier bebida del mundo que sea un destilado de agave, sea comercializada en ese país bajo la misma categoría, sin hacer distinción alguna de su origen.
La ANDO advirtió sobre una posible confusión entre los consumidores de bebidas destiladas de agave, luego de que en los Estados Unidos se haya implementado esta nueva categoría de bebidas denominada para designar a las producidas en ese país.
Así como porque países como España, Australia, África, entre otros, que han empezado a producir destilados a partir de agaves, «lo cual puede llegar a confundir a los consumidores, quienes pueden elegir otros productos de agave, pensando que son similares a los producidos en México, lo cual es muy distante a la realidad».
Para la asociación esto significa una «usurpación oportunista» en detrimento del trabajo que los productos mexicanos han desarrollado en apego a su cultura y que por generaciones han sido los únicos relacionados con estas plantas.
«Esta categoría ‘Agave Spirits’ ha comenzado a emerger en los Estados Unidos, pero seguro en el futuro clasificarán a otros destilados de agave como de Sudáfrica, Australia, España», señaló en el documento.
La ANDO puntualizó que las relaciones comerciales entre los países se mueven a gran velocidad y a pesar de que es evidente que no se puede evitar llamar a las cosas por su nombre, consideró que México y sus bebidas merecen, por su historia y su cultura, no ser clasificadas en la categoría de «Agave Spirits» junto con otras bebidas que no provienen ni se producen en el país.
Aceptarlo sería permitir, recalcó, el detrimento o disolución del prestigio y fama de los destilados de agave mexicanos con denominación de origen, principalmente impulsados por la industria del tequila y el mezcal.
«Tanto en clasificación normativa como en la comercial debes estar distinguidos, nuestras bebidas son identificadas por tres valores: la planta (agave), nuestra cultura ancestral en la elaboración de bebidas y México, país de enorme diversidad y cualidades, que juntos han sido nuestra forma de vida dese hace cientos de años y que hoy impulsan la comercialización y el desarrollo de los pueblos de México».
En el escrito manifestó que no desean que en las leyes, normas o reglamentos se les ubique en la misma clasificación que los destilados de agave de otros países, porque, finalmente, esta clasificación llegará a los centros de consumo, donde lamentablemente confundirá a sus consumidores haciéndoles creer que «la magia de los destilados mexicanos radica únicamente en la planta de agave».
«Es importante iniciar con el orden desde casa, aunque las Clases Niza utilizada por el IMPI no se pueden cambiar, proponemos crear una subclase que permita su clara identificación y uso en territorio nacional, para con ello crear la normativa que nos permita impulsar y justificar esta clasificación en los centros de consumo nacionales e internacionales».
La asociación propuso a la Secretaría de Economía Federal crear una subclase que lleve alguno de los siguientes nombres: «bebidas culturales de México», «bebidas mexicanas con denominación de origen», «bebidas ancestrales mexicanas» o bien, como segunda opción «destilados de agave de la cultura mexicana» en el que se excluiría al ron agrícola mexicano con denominación de origen charanda y posiblemente también al sotol o, como tercera opción «destilados de agave mexicanos».
Finalmente, mencionó que en el ámbito internacional la única región del mundo claramente destacable en el entendimiento de lo que representan los productos distintos diferenciados por su origen es la Unión Europea.
Por ello, también propuso que México lleve a cabo un acercamiento con la Unión Europea para que todas las bebidas con denominación de origen mexicanas sean agrupadas y clasificadas en una sola categoría.
Esto último, de acuerdo con el Reglamento (UE)/2019/787 del Parlamento Europeo y del Consejo de 17 de abril de 2019 sobre la definición, designación, presentación y etiquetado de otros productos alimenticios, la protección de las indicaciones geográficas de las bebidas espirituosas y la utilización de alcohol etílicos y destilados de origen agrícola en las bebidas alcohólicas.
Fuente: Pulso