El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mostró una hoja que afirma es el acuerdo migratorio con México.
El mandatario afirmó que incluye más de lo que se ha anunciado y agitó la hoja de papel frente a periodistas como prueba.
Trump no mostró el documento ni ofreció ningún detalle, pero una fotografía de Reuters del documento plegado permitió a reporteros leer algunas partes.
El acuerdo incluye un plan regional de asilo y el compromiso de México de revisar, y posiblemente cambiar, sus leyes, según la copia.
Si los Estados Unidos determina, bajo discreción y tras consultar a México, luego de 45 días desde la fecha de emisión de la declaración conjunta, que las medidas adoptadas no son «suficientes» para reducir la migración, el gobierno de México tomará todas las medidas necesarias con miras a garantizar este acuerdo», se puede leer en la hoja de Trump.
El texto habla de «un enfoque regional para compartir la carga en relación con el procesamiento de las solicitudes de estatus de refugiado de los migrantes».
Trump le dijo a periodistas que dejaría que México lo anuncie «en el momento adecuado», pero que «entra en vigencia cuando yo elija».
El presidente estadounidense había dicho el lunes que México pronto divulgaría parte del acuerdo sin ofrecer detalles.
Al anunciar detalles no divulgados previamente, las autoridades mexicanas dijeron el lunes que tenían 45 días para demostrar que los esfuerzos eran eficaces para reducir los flujos de migrantes, sino tendrían que conversar sobre más medidas con Estados Unidos.
Washington quiere que se declare a México como un tercer país seguro, en el que los solicitantes de asilo podrían estar en lugar de Estados Unidos, una demanda que la nación latinoamericana ha rechazado durante mucho tiempo.
El ministro de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard, dijo que cualquier acuerdo de ese tipo debería compartir la carga de asilo con otros países latinoamericanos.
El acuerdo evitó que Estados Unidos subiera un 5% los aranceles de importación a todos los productos mexicanos, una medida que Trump había prometido imponer a menos que México colaborara para frenar la migración.
México acordó el viernes tomar medidas para controlar el flujo de personas desde América Central, incluido el despliegue de 6.000 efectivos de una nueva guardia nacional en su frontera con Guatemala. El miércoles, los primeros uniformados empezarían a ser desplegados, dijo Ebrard.
Además, el funcionario informó que el programa de Protocolos de Protección a Migrantes (MPP, por sus siglas en inglés) -que obliga a México a recibir a los solicitantes de asilo en Estados Unidos que hayan pasado por territorio mexicano- se extenderá a tres nuevas ciudades de su frontera norte.