Un rayo fue el culpable del accidente del avión de pasajeros que se incendió ayer en Rusia y que dejó al menos 41 muertos, según el testimonio del piloto de la aeronave, de una aeromoza y de uno de los sobrevivientes.
Debido a un rayo, perdimos el contacto de radio y pasamos al régimen de pilotaje mínimo. En régimen de emergencia”, relató el piloto Denis Evdokimov a medios rusos.
Conseguimos restablecer la comunicación a través de la frecuencia de emergencia, pero era corta y funcionaba sólo de forma intermitente (…) Pudimos decir algunas palabras, pero luego el contacto desapareció”, detalló.
Por su parte, la versión de la aerolínea Aeroflot es que fue un “error técnico”.
Despegamos, entramos a una nube, había fuerte granizo y, en ese momento, hubo un tronido y una especie de relámpago, como electricidad”, detalló la aeromoza Tatiana Kasatnika.
Además, las dos cajas negras, dispositivos que registran datos y voces durante el vuelo, fueron recuperadas.
Los investigadores analizan tres principales hipótesis sobre la causa del desastre: pilotos sin cualificación suficiente, fallo del equipo o el clima, dijo la portavoz de la Comisión de Investigación de Rusia, Svetlana Petrenko.
La investigación considera varias versiones del accidente, entre las que se encuentran las insuficientes calificaciones de los pilotos, personal de comunicaciones y personas que llevaron a cabo la inspección técnica de la junta; mal funcionamiento de la aeronave, así como condiciones climáticas adversas”, expresó el organismo.
El domingo pasado, El avión, un Sukhoi Superjet-100 operado por la aerolínea nacional rusa Aeroflot, había despegado de Sheremetyevo, pero regresó a los pocos minutos y pidió aterrizar de emergencia.
El avión tocó tierra con brusquedad y surgieron llamas y humo negro de la parte inferior.
De los 78 pasajeros, sólo 37 lograron sobrevivir al escapar del aeroplano en los toboganes de emergencia.
Fuente Excélsior