Como hace un par de meses, la dirigente estatal del PRI, Lillian Zepahua García, declaró que por concepto de multas derivadas de la fiscalización del órgano electoral el partido tricolor adeuda 41 millones 244 mil pesos con 89 centavos –lo que les ha obligado a reducir salarios, recortar personal e inclusive bajar la operatividad del partido en las actividades ordinarias–, entonces algunos militantes y ex aspirantes al liderazgo del priismo veracruzano se preguntan por qué la premura de realizar en este momento una consulta directa a su militancia que obviamente implicará un doble gasto, cuando en septiembre próximo tendrá lugar otro proceso interno por la presidencia y secretaría general del CEN, el cual aceptó organizar el Instituto Nacional Electoral (INE) a solicitud de la dirigencia priista.

De hecho, el INE condicionó su participación a que el padrón priista tuviera corte de inscripción y actualización al menos dos meses antes de la elección, por lo que actualmente se realiza una campaña de afiliación y refrendo de la militancia.

Sin embargo, la elección interna en Veracruz, que se efectuará el próximo domingo 28, se basará en un listado anterior.

Esto inconformó al ex diputado federal por Cosoleacaque y ex delegado de IMSS, Antonio Benítez Lucho, quien declinó contender por la presidencia del CDE del PRI, pues proponía que el proceso interno de Veracruz se empatara con el nacional y se actualizara el padrón de militantes.

Este domingo, casualmente, el diario El Universal publicó que “los dos partidos con los listados más grandes, el PRI y el PRD, enfrentan el problema más grave, pues a juzgar por el número de quejas de afiliación forzosa e inconsistencias detectadas por el INE al corte del 14 de enero pasado, habrían inflado sus listados de militantes.”

En un artículo firmado por la reportera Carina García sobre la “limpia” que aplica el INE en las listas de militantes de los partidos políticos, el periódico capitalino detalla que, según el órgano electoral federal, “el PRI tenía en enero 51 mil 338 adeptos duplicados y 9 mil 585 inconsistencias en su listado reportado al instituto, el cual registra 6.6 millones de miembros.”

“Además, 10 mil 134 personas acusaron al tricolor de afiliación indebida. Sólo una parte de esos casos fue resuelta y causó multas al PRI por 6.4 millones de pesos.

“Las miles de denuncias pendientes implicarían, sólo para el PRI, 422.2 millones de pesos más, pero gracias al proceso excepcional de depuración de padrones se congelaron todos los procedimientos sancionadores”, puntualiza el diario, detallando que “según este proceso, los partidos ‘descargarán masivamente’ –bajarán del padrón– a miles de quejosos y a militantes en cuyo expediente no hay cédula de afiliación voluntaria, y quedarán a reserva para revisar uno por uno esos casos.”

Supuestamente, “el PRI está en revisión de su base de datos, así que visitará a sus afiliados para corroborar su deseo de permanencia.”

Sedeco: fondo sin futuro

Quién sabe recomendada ahora por quién –pues en su larga pero gris carrera burocrática siempre ha buscado el cobijo de diversos hombres de poder, desde el ex gobernador Fidel Herrera Beltrán hasta el ex alcalde coatepecano Roberto Pérez Moreno, (a) Juanelo, y, entre otros, el notario público de esa cafetalera ciudad, Rafael Ortiz Castañeda, quien inclusive la llevó a pasear a Europa cuando en 1993 fue invitado por Dante Delgado a la Embajada de México en Italia–, Rossana Croda Todd  acaba de tomar posesión el pasado 5 de abril como directora del Fideicomiso Fondo del Futuro, dependiente  de la Secretaría de Desarrollo Económico (SEDECO) que encabeza el empresario Ernesto Pérez Astorga, uno de sus influyentes vecinos en Coatepec incrustado desde diciembre pasado en el primer círculo del gobierno estatal de Morena.

Pero, según nos cuentan, apenas hizo su entrada triunfal a su oficina fifí en la Torre Ánimas, a la señora Croda Todd le afloraron de inmediato todos sus traumas, rencores y frustraciones, entre ellas la que parece haberla dejado marcada para siempre: la ruptura de un antiguo prometido, connotado ex militante xalapeño del PAN, que de última hora deshizo su compromiso matrimonial.

Y es que, en menos de una semana, la altiva y presuntuosa directora realizó un despido masivo e injustificado de casi 30 por ciento de la plantilla de personal, casi en su totalidad mujeres, curiosamente.

Sin tomar en cuenta el profesionalismo, la trayectoria administrativa y la capacidad intelectual de sus subalternos, en forma totalmente antiética, a través de uno de sus secuaces, fue sacrificando en serie al personal del Fideicomiso.

De los pocos que se salvaron de su guadaña está, por obvias razones, José Belfort Enríquez Carretero, ya que se trata del yerno de oro de la contadora Cecilia Coronel Brizio, jefa de la Unidad Administrativa de la SEDECO. Pero también existe otro caso aparentemente inexplicable, el de Karla Montes Martínez, pues en Palacio de Gobierno tienen identificada a una de sus familiares más cercanas que difama casi a diario al jefe de Pérez Astorga y también de doña Rossana Croda, refiriéndose a él con menosprecio y llamándolo despectivamente “El Cuícaras”.

Bueno, tal vez doña Rossana decidió mantenerla en la nómina para que vean que en esta administración estatal de Morena sí hay tolerancia a todo tipo de crítica y se respeta plenamente la libertad de expresión.

A ver si se lo reconocen.