Desde a mediados de septiembre del año pasado, tanto Cuitláhuac García, entonces gobernador electo, como Eric Cisneros, perfilado ya para ocupar la Secretaría de Gobierno, comenzaron a ventilar el caso de las videocámaras adquiridas por la gestión yunista, remarcando que aparte de ser aparentemente obsoletas, “se pagaron mil 200 millones de pesos por adelantado y el trabajo (de instalación) no se concluyó”.

Inclusive García Jiménez solicitó públicamente a los miembros del recién instalado Comité Ciudadano de Vigilancia y Seguimiento del Proceso de Entrega y Recepción de las Dependencias y Entidades de la Administración Pública 2016-2018 –creado por decreto dos semanas antes por el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares– que le pidieran al mandatario estatal del PAN “la información de cuántas cámaras hay, el lugar donde se encuentran, cuántas funcionan, el financiamiento de éstas y su costo total.”

Y es que desde octubre de 2017, Yunes Linares había anunciado que instalarían 6 mil 476 cámaras de videovigilancia, lo que aumentaría en mil 700 por ciento el número de estos dispositivos, pues sólo funcionaban 180 en toda la entidad. El mandatario panista detalló que este moderno sistema sería instalado en ciudades de seis regiones estratégicas del estado: Pánuco con 404 cámaras; Poza Rica, mil 136; Xalapa, dos mil 052; Veracruz, mil 900; Córdoba, 700, y Coatzacoalcos, mil 084. La cobertura total alcanzaría una extensión de más de 21 mil 594 kilómetros cuadrados de territorio.

Casi un año después, en un foro sobre Acciones Preventivas contra el Delito realizado en el Instituto de Municipal de Arte y Cultura (IMAC), de Xalapa, el candidato triunfador de Morena expuso: “Yo no quiero actuar de mala fe, vamos a esperar. Y lo que pido, lo vuelvo a repetir: es para ver si es cierto que este Comité Ciudadano tendrá la información y transparentará la entrega-recepción. Le pedimos información detallada de las cámaras de vigilancia y de la empresa concesionaria.”

Cuitláhuac se refería a la empresa Comtelsat, que fue beneficiada por Yunes Linares pese a que fue inhabilitada en septiembre de 2014 por la Secretaría de la Función Pública por defraudar a PEMEX. En ese mismo año también le fueron embargadas las cuentas bancarias por el incumplimiento del pago a sus trabajadores, al IMSS, Infonavit y al SAT.

Esta empresa forma parte del Grupo Lauman, que preside Manuel Arroyo, propietario del periódico El Financiero. Pero uno de sus presuntos socios sería Bernardo Gómez Martínez, copresidente ejecutivo de Grupo Televisa, quien el pasado martes por la noche reunió en su casa al presidente López Obrador y a Jared Kushner, yerno y asesor sénior del mandatario estadounidense Donald Trump.

¿Alguien cree entonces que Cuitláhuac y Cisneros van a proceder penalmente contra los responsables y beneficiarios de este burdo megafraude?

Bueno, hasta el secretario de Seguridad Pública, Hugo Gutiérrez Maldonado, ha guardado silencio últimamente también, no obstante que en enero el supuesto sobrino de la esposa de AMLO había denunciado que “solamente opera, y con deficiencias, el 34 por ciento” de las 6 mil 316 de cámaras que la administración anterior instaló en la entidad.

PRI: contienda entre primos

Según comentan algunos destacados miembros del PRI, de las seis fórmulas que se registraron para la dirigencia estatal del partido tricolor, la contienda interna se reduciría prácticamente a las encabezadas por los primos Marlon y Adolfo Ramírez.

Y es que refieren que luego de la sorpresiva declinación del ex delegado estatal del IMSS, Antonio Benítez Lucho, el que aparentemente se fortaleció sería el “Fofo” Ramírez Arana, ex dirigente juvenil, ex diputado local y ex alcalde de Paso de Ovejas, ya que además de ser apoyado por el grupo del diputado federal Héctor Yunes Landa –como Jorge Moreno, Tomás Carrillo, Alicia González Cerecedo, Silem García Peña, Crisóforo Hernández Cerecedo, Yolanda Gutiérrez Carlín, Carlos Rodríguez Velasco y Edmundo Martínez Zaleta, entre otros– también se le habrían sumado Ranulfo Márquez y Ricardo Landa Cano, además de la ex lideresa cenecista Bertha Hernández Rodríguez e Ignacia García López.

Respecto a la fórmula de Zaida Lladó nos comentan que no tendría padrinazgos, más que el apoyo solidario de sus correligionarios y amigos de la Corriente Crítica de la que forman parte militantes históricos como Ricardo Olivares Pineda y Eduardo Thomaé, a cuyas reuniones es asistente asiduo también el ex regidor xalapeño y ex dirigente municipal del PRI, Jorge Landa, razón por la que habría sido invitado a acompañarla en la consulta interna.