Al margen de las modificaciones que realizó este miércoles el Congreso de Veracruz al tema del presupuesto, bien vale la pena detenerse en la revisión de la etapa de acuerdos y diálogo que prevalece al interior de la Legislatura estatal.
Luego de las diferencias que prevalecieron en el caso del juicio político contra el fiscal Jorge Winckler Ortiz, los legisladores de todos los partidos dieron muestras de que los acuerdos son posibles en el Congreso local.
Al final de la jornada del miércoles, los representantes de todas las fuerzas políticas representadas en el Legislativo emitieron anuncios de reconocimiento al proceso, por sacar un presupuesto que dejó satisfechas a todas las partes.
Incluso, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez celebró la aprobación unánime del Presupuesto de Egresos 2019, que establece recursos por más de 128 mil 361 millones de pesos.
El mandatario estatal calificó de histórico el presupuesto, que contempla 575 millones de pesos para la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca; 150 millones para la Secretaría de Desarrollo Económico y Portuario; 2 mil 233 millones para la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas; y 128 millones para la Secretaría de Turismo y Cultura.
Básicamente, el presupuesto para 2019 establece que el desarrollo del campo veracruzano y de la infraestructura y vías de comunicación son una prioridad.
En el Congreso de Veracruz, mientras tanto, los responsables de los acuerdos de Morena con otras fuerzas políticas no ocultaron su satisfacción; el presidente de la Junta de Coordinación Política, Juan Javier Gómez Cazarín no sólo ponderó la unanimidad con que fue aprobado el presupuesto, sino que celebró que la Legislatura de Veracruz haya sido la primera en aprobar la Ley de Austeridad para el Estado.
Si bien el tema de los juicios políticos contra el fiscal estatal ganó reflectores, la realidad es que la actividad en el Legislativo veracruzano ha ido mucho más allá: están por aprobarse, por ejemplo, 18 decretos; han sido presentadas 52 iniciativas; fue aprobada la Ley de Planeación del Estado; reformado el Código Hacendario para el municipio de Xalapa; y modificada la Ley de Obras Públicas.
Por obvias razones, por supuesto, el tema del fiscal acaparó miradas y expuso de forma innecesaria al golpeteo al presidente de la Jucopo; sin embargo, parece que poco a poco se asientan las aguas en el Congreso de Veracruz.
Se ha hablado, por ejemplo, de falta de control y pericia en la operación legislativa; sin embargo, si esa incapacidad existiera, fuera real, no hubiera salido el presupuesto de forma unánime.
En ese contexto, no ha faltado quien intente meter ruido en el Congreso con la aparente intención de minar al presidente de la Jucopo; Gonzalo Guízar, por ejemplo, se apresuró este miércoles a declarar que al perder Morena a tres de sus diputados, podría perder también el órgano de dirección interna; sin embargo, un día después, este jueves, a la Diputación Permanente llegaron los oficios de los diputados José Magdaleno Rosales Torres, Jessica Ramírez Cisneros y Augusto Nahúm Álvarez Pellico, quienes dicen que siempre no renuncian al Grupo Legislativo de Morena.
Así las cosas, parece que las aguas en la Legislatura vuelven a su nivel; con una presidencia de la Jucopo confirmada, fortalecida; y con algunos diputados, como la xalapeña Rosalinda Galindo muy bien evaluada y reconocida, hasta por los propios panistas, por su desempeño en la negociación del presupuesto. @luisromero85