La Arquidiócesis de Xalapa exigió al secretario de Gobierno, Eric Patrocinio Cisneros Burgos, que respete el derecho humano a la libertad religiosa, porque sus comentarios sobre la Iglesia católica “revela ignorancia y faltas graves de respeto que jamás se esperarían de un servidor público”.
La Arquidiócesis de Xalapa reconoció que en el comunicado del pasado domingo 9 de febrero, hizo señalamientos en el sentido de que esta administración estatal no puede justificar con novatez y curva de aprendizaje los desaciertos que han tenido en 74 días de gobierno, por lo que exhortó a los integrantes del gabinete estatal para que trabajen, porque el ambiente está “enrareciéndose” y hay algunos funcionarios “recomendados” que no funcionan, por lo que se deben tomar decisiones, ante de que Veracruz “se encienda”.
Este domingo 17 de febrero recalcó que “los fracasos de la administración estatal y las torpezas a los que nos hemos referido en comunicados anteriores, son de dominio público y han creado ya una psicosis social que no se sabe quién la controlará, porque los ciudadanos no perciben una estrategia clara, proyectos de gran alcance ni eficiencia en los colaboradores gubernamentales”.
El director de Comunicación Social de la Arquidiócesis, José Manuel Suazo Reyes, refiere en este boletín que a partir del viernes 15 de febrero, empezó a circular a través de las redes sociales, un video donde el Secretario de Gobierno de Veracruz, Eric Patrocinio Cisneros Burgos, en un acto académico, hizo comentarios “muy desafortunados sobre la Iglesia Católica y sobre el ministerio de los sacerdotes”.
Señala que, en este acto público, estaba presente el gobernador Cuitláhuac García Jiménez y ahí Cisneros Burgos acusó a la Iglesia católica de apropiarse de algunos valores espirituales y de usar el sacramento de la confesión para las homilías dominicales.
La Arquidiócesis afirmó que las acusaciones del secretario de Gobierno son completamente falsas y este comentario “revela ignorancia y faltas graves de respeto a nuestra Iglesia, que jamás esperaríamos de un servidor público”.
Agrega que la comunidad católica “se siente agraviada porque en forma burda y sin ninguna necesidad, se exhibe el ministerio de los sacerdotes, acusándolos de revelar el sigilo sacramental y desacreditando su ministerio”.
Le recuerda a Cisneros Burgos que “los valores son universales, ningún grupo ni asociación tiene la patente de los mismos. Agregamos que con este comportamiento se agrede el derecho humano de la Libertad Religiosa”.
Expresa que “la homilía dominical surge de la Palabra de Dios que se proclama en todo el mundo siguiendo el calendario litúrgico. Para un sacerdote es un delito grave revelar el secreto de confesión, se caería inmediatamente en la excomunión. El sigilo no se puede revelar, ni siquiera muerta la persona”.
Explica que la libertad religiosa es multidimensional y su ejercicio requiere el respeto del fuero interno y externo de las personas, así como sus manifestaciones individuales y colectivas, públicas y privadas.
Señala que estas dimensiones incluyen la libertad de conciencia en materia religiosa, la libertad de culto, la libertad de difusión de los credos, ideas u opiniones religiosas; el derecho a la formación religiosa de los miembros de una iglesia o grupo religioso; el derecho a la educación religiosa, de los hijos, en primer lugar, pero también de la sociedad en su conjunto; el derecho a la asociación religiosa; y el derecho a la objeción de conciencia.
Explica que “el Estado no debe preferir determinada religión, creencia o cosmovisión en detrimento de las demás pero, al mismo tiempo, debe reconocer sus aportes a la producción de bienes públicos. En una sociedad democrática, laicidad y libertad religiosa son complementarias e igualmente necesarias”.
Finalmente, la iglesia católica le recuerda a Cisneros Burgos que la tarea del Secretario de Gobierno es mantener la gobernabilidad y favorecer una convivencia pacífica entre los diferentes actores. “No abona en nada polarizar a la sociedad ni enfrentar a los diferentes actores sociales; la buena gobernanza se consigue mediante el respeto, el diálogo y la colaboración, finaliza.
AVC/Verónica Huerta