Con motivo del Día Internacional del Cáncer Infantil, la diputada Dulce María Méndez de la Luz Dauzón, del Grupo Parlamentario de Movimiento Ciudadano, se pronunció porque se dé prioridad en la atención a niñas y niños con cáncer, para que cuenten con las mismas oportunidades de recibir un diagnóstico y el tratamiento apropiado para alcanzar una vida plena.
Señaló que de acuerdo con cifras del Centro de Apoyo de Niños con Cáncer, anualmente en México se registran 7 mil 500 nuevos casos de cáncer infantil; la leucemia, los tumores cerebrales y el cáncer linfático son los más comunes. Cada cuatro horas muere un niño y éste padecimiento es la segunda causa de muerte infantil después de los accidentes.
La legisladora veracruzana, destacó que gracias a los adelantos de la ciencia y tecnología la lucha contra el cáncer es intensa y las batallas ganadas cada día son mayores. Hoy la posibilidad de sobrevivir a un cáncer infantil ha aumentado, dado que el 75 por ciento de los niños diagnosticados logran sobrevivir, en promedio, 5 años más.
Explicó que la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes reconoce 20 derechos de las personas menores de edad, entre ellos el de la protección de la salud y a la seguridad social, así como a recibir la prestación de servicios de atención médica gratuita y de calidad con el fin de prevenir, proteger y restaurar su salud.
Dijo que como legisladores, es su obligación luchar por la aprobación de recursos suficientes y dignos en los presupuestos destinados al sector salud, para prevenir, investigar y atender el cáncer infantil. “Se necesita una buena dosis de voluntad política para combatir el cáncer infantil, entenderlo constituye un paso fundamental lograr su prevención y tratamiento”.
Finalmente la diputada Méndez de la Luz Dauzón, dijo que en el Grupo Parlamentario de Movimiento Ciudadano, están convencidos de que la curación del cáncer comienza con su prevención, y que las niñas y los niños que lo padecen tienen derecho a un diagnóstico y a un tratamiento oportuno que sólo es posible conseguir con un presupuesto suficiente y con acciones de gobierno que garanticen el derecho humano a la salud. Las niñas y los niños deben ser nuestra prioridad, concluyó.