Uno de los delitos que mayor incremento registra en nuestro país en la última década es el secuestro.
El Observatorio Nacional Ciudadano, con datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública, aporta cifras preocupantes sobre ese ilícito; por ejemplo, que en junio pasado en nuestro país se registró una víctima de secuestro cada 6 horas y 16 minutos.
La mayoría de los casos, casi 82 por ciento, fue en la modalidad de secuestro extorsivo, aunque también destaca el secuestro para causar daño, con 11.7 por ciento; y el secuestro exprés, con 4.26.
Si ese delito ya era preocupante, lo que ha pasado de 2016 a la fecha resulta alarmante, dado que se trata de los años con los más altos números; de enero a junio del presente año se consignan 716 casos; en el mismo periodo de un año atrás fueron 887; y en 2016, 839 casos.
Tres entidades del país concentran las mayores cifras en secuestro: Estado de México, con 136 en el primer semestre del año; Veracruz, con 106 en el mismo periodo; y Tamaulipas, con 89. Esos tres estados acumulan el 46 por ciento del total nacional.
Para ubicar en la perspectiva nacional, habría que decir que la tasa nacional de secuestro en el primer semestre del año fue de 0.57 víctimas por cada 100 mil habitantes; Veracruz, lamentablemente, fue la tercera entidad con la mayor tasa: 1.29 víctimas por cada 100 mil.
De los mil 149 secuestros registrados durante 2017 en todo el país, en Veracruz se cometieron 172; es decir, más del 10 por ciento de los casos nacionales tuvo se origen en la entidad veracruzana.
Este año, de enero a julio (el reporte más reciente), en todo el país se denunciaron 565 secuestros, de los cuales, 89 ocurrieron en Veracruz, que concentró más del 15 por ciento del total nacional.
El tema, al margen de las cifras, se convirtió en un verdadero drama para un estado que desde hace diez años ha enfrentado sus peores días en la época contemporánea en materia de inseguridad.
La asociación Alto al Secuestro, que preside la activista Isabel Miranda de Wallace, aporta cifras escalofriantes en torno al tema: desde 2010 a la fecha, el número de casos de secuestro en Veracruz se ha disparado de forma exponencial; en 2010 fueron 17; en 2011, 60; en 2012, 91; en 2013, 154; en 2014, 166; en 2015, 174; en 2016, 268; y en 2017, 287 secuestros.
Así, en ocho años Veracruz pasó de 17 a 287 secuestros.
Alto al Secuestro realiza un interesante comparativo de los primeros once meses de la administración del gobernador Miguel Ángel Yunes Linares con relación al mismo periodo de Javier Duarte de Ochoa; y consigna un aumento de 462.2 por ciento, al pasar de 61 a 343 denuncias por este ilícito.
Desde diciembre de 2010 a octubre de 2016, periodo en que Duarte ocupó el Poder Ejecutivo de Veracruz, se cometieron en la entidad 846 secuestros. En los dos meses del interino Flavino Ríos fueron 41 casos; y en 12 meses de Yunes Linares, 343 secuestros.
Coatzacoalcos, Xalapa, Poza Rica, Minatitlán, Acayucan, Boca del Río, Veracruz, Papantla, Tuxpan, Córdoba, Orizaba y Martínez de la Torre son los municipios veracruzanos con las estadísticas más altas.
De forma oficial, con datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública, se consignan 261 secuestros en 19 meses del gobierno de Miguel Ángel Yunes.
Como sea, 261 o 343 o más que eso tomando en cuenta el número de casos que no se convierte en carpeta de investigación, el punto es que el secuestro es uno de los grandes pendientes de la agenda gubernamental veracruzana en materia de seguridad pública; simplemente es un delito en el que las autoridades no han podido dar resultados satisfactorios. @luisromero85