La competencia lingüística está asociada directamente con la justifica social, opinó el profesor titular en la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, España. “El lenguaje es la herramienta humana por excelencia, si tú dominas mejor la herramienta tienes más posibilidades”, sentenció.

Cabe recordar que la Universidad Veracruzana (UV) fue sede del Coloquio Internacional sobre Investigación en Lenguas Extranjeras (CIILE), actividad organizada por el Cuerpo Académico Las Lenguas Extranjeras en el Sistema Educativo Público en México de la UV; los Grupos de Investigación Lexi y Profile del Departamento de Lenguas Extranjeras de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá, y el grupo de Investigación del Departamento de Didáctica de la Lengua y la Literatura de la Universidad de Granada, España.

Si bien el CIILE se desarrolló en el puerto de Veracruz del 20 al 22 de junio, la primera actividad fue el seminario “Español lengua extranjera: Enseñanza, práctica e investigación”, que tuvo lugar del 15 al 19 de junio y cuya sede fue la Escuela para Estudiantes Extranjeros, región Xalapa. En él participaron 33 estudiantes de licenciatura y posgrado, así como académicos, en ambos casos de todas las áreas del conocimiento.

El instructor fue precisamente Francisco Lorenzo, autor de libros como Motivación y Segundas Lenguas (Arcolibro, 2006), Educación Bilingüe (Síntesis, 2011) y Competencia Comunicativa en Español L2 (Edinumen, 2004), quien en entrevista comentó que el seminario se desarrolló con la intención de transmitir un mensaje:

“Que ellos fuesen conscientes que tienen un activo: el conocimiento de la lengua española, por el hecho de ser hablantes nativos de un idioma que es internacional. Solamente hay cuatro lenguas internacionales en el mundo: inglés, chino, árabe y español; entonces éste tiene una importancia fundamental en un momento crítico de la vida de la humanidad, donde todo se ha globalizado, eso va a suponer un multilingüismo universal, básicamente con lenguas internacionales”.

La consciencia debe recaer en que ser hablante nativo del español tiene un valor cultural importante, pero también económico. A manera de ejemplo citó que en España se ha corroborado que el idioma aporta varios puntos al Producto Interno Bruto, con actividades como la enseñanza del mismo, las industrias culturales que hay alrededor él, el turismo, entre otros.

Es evidente, remarcó, que se requiere tener una técnica para la enseñanza del español; en ese sentido, detalló que la academia tiene varias áreas de investigación, en su caso, actualmente es investigador principal del proyecto I+D de Excelencia del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad (2016-2020) titulado BIMAP (Mapa del lenguaje académico en educación bilingüe), donde coordina el trabajo de 30 investigadores de la Universidad de Málaga, la de Granada, y universidades alemanas, austriacas y finlandesas.
“Nos dedicamos al análisis computacional del lenguaje, es decir, nosotros cogemos lo que producen los alumnos y lo analizamos computacionalmente con unas herramientas informáticas potentes que te dicen en qué punto de competencia está el alumno y cómo va evolucionando a lo largo del tiempo. De manera que la evaluación ya no depende tanto del profesor”.

Aclaró que la ortografía y la gramática no es tan importante como la riqueza léxica, el uso de estructuras complejas, mecanismos de cohesión sintáctica, “cuestiones que a lo mejor los profesionales del idioma no están conscientes”.

Desde la Tierra del Fuego, Argentina, hasta Illinois, Estados Unidos, se habla en español, destacó el académico; al tiempo que dejó en claro que “la lengua española, aunque con cierta diversidad dialectal, pero está muy cohesionada”. A manera de ejemplo dijo que él puede leer y disfrutar, sin problema alguno, la obra literaria de Carlos Fuentes.

“La gente sabe que el idioma es algo importante, pero existen clichés. (Por otro lado) está el trabajo de los investigadores, que lo que tenemos que hacer es desarrollarlo, explicarlo mejor, ponerlo en valor y difundirlo, dar una alerta y decir ‘¡Atención, tenemos aquí una mina! Y podemos hacer uso de ella’”.

Entre los desafíos que citó para la academia, respecto al tema, está el hecho de que todos los alumnos tengan un nivel de competencia importante, “porque el lenguaje es el centro del éxito educativo; el factor más importante es el dominio del lenguaje”.

El también coeditor invitado de un volumen doble monográfico sobre Languages of Schooling que se publicará en el European Journal of Applied Linguistics, insistió en decir que en Europa lo que más preocupa actualmente, en materia de investigación educativa, es cuantificar la competencia lingüística y promoverla, por cuestión de justicia social.

“Se trata de que tú domines muy bien la herramienta para usarla mejor, que no te engañen con el lenguaje y no te manipulen; para que puedas expresarte, interpretar, tener voz propia y saber utilizarla. Tiene una dimensión social muy importante”, dijo el también miembro del comité director del European Language Council.

A manera de conclusión, celebró que actualmente pueda medirse la competencia lingüística, para conseguir sistemas educativos más equitativos. “Eso es lo que ahora mismo preocupa más en Europa”.