El matrimonio formado por Fernando Reyes Luna y Ana Dorantes denunciaron que la procuradora estatal de Protección a niños, niñas y adolescentes, Helena Paola Laudi, no ha atendido el caso de un menor de edad que fue arropado por la pareja al ver las condiciones en las que vivía originalmente con su familia, ahora la autoridad les exige que devuelvan al menor con su familia originaria, a pesar de que el menor sufría maltrato ahí.

En conferencia de prensa, la pareja recordó que incluso interpusieron una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) por este caso, ya que acusó que las autoridades se niegan si quiera a apoyarlo en un proceso de adopción del menor que entonces tenía cuatro años.

Recordó que el menor originario de Naolinco vivía con su familia, pero había una omisión de los cuidados, pues dijo que incluso le negaban la alimentación, por lo que pidió encargarse del menor y la familia aceptó.

“No le daban de comer, le daban mamilas llenas de agua con azúcar; me acerqué a la familia y le dije que me permitieran que yo lo cuidara y en 2015 me lo llevaron y ahí se quedó. Yo le procuré todo el bienestar, su salud, alimentos, escuela y juguetes, pero llegó un día la familia y lo sacaron de la escuela para llevárselo dos meses”.

Tras esto, aunque el niño volvió con la pareja la familia emprendió acciones legales para que el menor fuera devuelto al seno familiar, sin tomar en cuenta las condiciones de precariedad en la que vive.

“El DIF ha tenido conocimiento y no ha hecho nada por defender los derechos de este niño. A pesar de que sabía que. Había sido sacado de la escuela, cómo vivía, siempre me daban largas en el asunto y no me resuelven nada”.

No obstante, reconoció que la patria potestad del menor la tiene la madre, la cual se encuentra en un anexo por problemas de drogas y alcohol y la abuela, que se encargaba de su cuidado, se dedica a una vida desordenada.

“El menor ha sufrido mucho con la familia, pero las autoridades dicen que debe regresar con la familia o ir a un albergue. Con la familia le espera ese sufrimiento parecido y en el albergue sería un número más y no hay ese amor”.

Dijo que incluso se ha acercado al DIF Municipal de Naolinco para pedir asedaría, pero la respuesta fue que “ni viendo al gobernador, ni a su esposa, ni al presidente de la República podría haber solución”.

Fernando Reyes pidió a las autorizadas que le ayuden a defender al menor de edad, que actualmente lo tiene en su cuidado pero sin ningún documento legal que los ampare.

“Yo le quiero pedir a la procuradora que le permita a este niño quedarse donde se siente feliz, que lo escuche por que no lo han escuchado de manera formal, el niño ya tiene ocho años de edad”.

Perla Sandoval/Avc