En México el periodismo no es una profesión en la que se respete el trabajo de los comunicadores, así lo refleja en el libro “Romper el Silencio, 22 gritos contra la Censura”.

En la presentación del escrito, la doctora en letras, Magaly Velasco Vargas, reconoció que la actividad del periodismo se asemeja a estar en un frente de guerra, donde prevalece la desprotección y la orfandad de los trabajadores de los medios de comunicación.

En entrevista, reconoció que el libro cuenta con testimonios, que además de tener una buena narrativa, exponen que el fenómeno de hostilidad que viven los comunicadores en Veracruz, se replica en la mayoría de los estados.

Los 22 testimonios de igual número de comunicadores entre los que se incluye a los veracruzanos Ignacio Carvajal y Norma Trujillo, dan cuenta de la violencia y del acoso que se vive en los medios de comunicación.

Además, ponen en evidencia el sentido de compromiso y ética de los periodistas, que son cazados tanto por el Gobierno, como grupos delincuenciales.

“El tema de censura no es nada más de Veracruz, la sensación de censura esta desde la frontera norte hasta el sur, no es un problema local, el comportamiento se replica en Quintana Roo, Chiapas y Oaxaca”.

En la narrativa se describe el asesinato de colegas, el escapar de las familias y el exilio, al que se ha sometido a muchos otros periodistas, en especial porque se olvida que los comunicadores tiene derechos.

Puso de ejemplo la experiencia del corresponsal de Le Monde, quien afirmó que en Francia ser periodista da un estatus de respeto y en México es sinónimo de soledad, nadie respeta la labor y no se da protección a quien difunde información que incomoda a los políticos o delincuentes.

Avc