Prefacio.

¡Esa maldita percepción! No es otra cosa, que un arma de doble filo. *** En su afán de eternizarse en el poder, Miguel Ángel Yunes Linares hace uso de la percepción. Difunde fantásticas versiones en las que, a nivel estatal, su primogénito alcanza niveles de aceptación similares a los que consigue en todo el país Andrés Manuel López Obrador, ¡rayando el 50 por ciento! *** Político, dirigente o comunicador con quien cruzan palabras, tanto el padre como el hijo presumen de llevar una “sólida delantera” y les advierten que “se estarán equivocando” si manifiestan su preferencia por otro de los aspirantes. *** Y sin embargo es esa “maldita percepción”, la que más dolores de cabeza le generan al gobernador y, por ende, a su hijo. *** La Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), que realizó el INEGI en el mes de marzo, refleja que el 94.8% de los habitantes de Coatzacoalcos de 18 años y más (o sea: ¡todos!) considera que vivir en su ciudad es inseguro. *** Este municipio en el sur de Veracruz, punto neurálgico en el programa de Zonas Económicas Especiales (área con ventajas naturales y logísticas para convertirse en una región altamente productiva. Su objetivo es democratizar la productividad, a nivel regional, para que sus habitantes tengan las mismas posibilidades de desarrollo y bienestar que los del resto del país) se ubica en segundo lugar a nivel nacional en el rango de ciudades donde sus habitantes registran la mayor percepción de inseguridad. *** No es esta la primera ocasión en la que Coatzacoalcos destaca en esta encuesta, lo grave es que esa percepción negativa va en aumento. Apenas en diciembre de 2017 el 93.6% de los habitantes de esta ciudad se sentía inseguro. *** Y no se crea que se trata de un cuestionario en el que interrogan a los ciudadanos acerca de si se siente inseguro o no. Va más allá. Se toman en cuenta la sensación de inseguridad por el temor a ser víctimas de un delito; la expectativa social sobre la tendencia del delito; los casos en los que los encuestados han sido testigos de conductas delictivas o antisociales; el cambio de rutinas por temor a ser víctima del delito; la percepción sobre el desempeño de las policías, todas. Desde la Municipal y la Estatal, hasta la Federal, la Gendarmería Nacional, el Ejército y la Marina. *** Ese detalle, el de la “percepción” es el que tiene a Miguel Ángel Yunes Márquez en el suelo, en las mediciones en la zona sur de la entidad, detalle que no muestra –por supuesto- la más reciente encuesta contratada por su “papi”.

* * *

Quienes han hecho trabajo político en el extremo norte de Veracruz lo pueden confirmar. Allá las campañas se inician a las ocho de la mañana y concluyen a las 5 de la tarde. Pánuco y los municipios aledaños son “tierra sin ley”. De todos es conocido que las autoridades locales gobiernan “a distancia” y mantienen acuerdos con los grupos criminales que dominan en la región.

Durante los procesos electorales, el crimen organizado juega un papel fundamental en aquella zona. Colabora con el financiamiento de candidatos, pero además –con el fin de “vigilar su inversión”- conforman los grupos de choque, los que de manera eufemística se conocen como “encargados de la contención”, que no es otra cosa que amedrentar a los operadores electorales de los candidatos contrincantes, sin limitación alguna. Van desde la amenaza, hasta el asalto, el “levantón” o hasta el homicidio. Todo vale.

Todo eso se puede hacer cuando las autoridades, tanto locales como estatales, están de acuerdo. Los cuerpos de seguridad se desentienden de esos ilícitos y candidatos y promotores del voto opositor viven, literalmente, a salto de mata.

Esta semana lo pudo corroborar el regidor priista de Pánuco, Eslim Mujadí Romero Olguín. Lo esperaron a que saliera de su domicilio, en el centro de la cabecera municipal, y lo molieron a golpes, al grado de que sufrió traumatismo craneoencefálico.

No hay que ser un genio para sumar dos más dos. Entre los más “fieles” (por ahora) operadores electorales del clan Yunes-Márquez en la zona norte figuran Ricardo García Guzmán y sus hijos, Ricardo y Rodrigo, señalados en múltiples ocasiones de tener nexos con grupos delincuenciales.

El compromiso de Los Tres García es acarrearle al cachorro el mayor número posible de votos (“si los muertos pueden votar, que lo hagan por Miguelito”, ha sido la instrucción). Si para conseguir su objetivo hay que “apretar” algunas tuercas, no se tentarán el corazón.

Es por eso que suena oportuna la alerta lanzada por Pepe Yunes a las autoridades: “Todos sabemos que la violencia en Pánuco es parte de una campaña de intimidación de cara al Proceso Electoral 2018 y una expresión de impunidad”, advirtió el abanderado priista.

“Le exigimos al gobernador @YoconYunes las mínimas garantías para la participación política en Pánuco y que se cumpla la ley, la cual parece haberse supeditado a conveniencias y alianzas políticas”, sentenció Pepe Yunes en las redes sociales.

Es momento de que la autoridad electoral levante la voz, o… ¿los congela el miedo?

* * *

Epílogo.

Obtener una posición relevante en las listas de candidatos plurinominales no es razón para quedarse en casa y esperar a ser llamado a rendir protesta. Así lo entiende Anilú Ingram, quien ha diseñado una cargada agenda de trabajo, apoyando a los abanderados de su partido y caminando por el territorio veracruzano en busca del voto. Esta semana estuvo en Tatahuicapan acompañando a la candidata a la diputación federal por el distrito XX, Yamileth Cruz Escobar. Ahí anunció que las diputadas federales, trabajarán por la inclusión, sin excepción, para la población más vulnerable, para los trabajadores del campo y las comunidades indígenas, alineando la política social en los ámbitos federal y local. Juntas, las candidatas recorrieron las localidades de Zapoapan, Tecuanapa y Piedra Labrada. *** Los incendios en la Riviera Veracruzana no fueron sofocados por los vecinos, como se dijo a principios de esta semana. Fueron los bomberos de la Administración Portuaria de Veracruz (Apiver) los que encabezaron los operativos de rescate. Además, las evidencias muestran que estas conflagraciones fueron provocadas. A esas conclusiones llegó el ex director de Obras del Ayuntamiento de Veracruz, Salvador Barbes Navarro, vecino de esa zona. *** Sucesos que alimentan esa “percepción” de inseguridad en el sur de Veracruz: Cerca del mediodía de este miércoles, mientras se encontraba refugiándose del sol, un checador de autobuses, conocido como “El Chaneque” o “El Chucky”, fue atacado a tiros por dos sujetos que se movían en una motocicleta. Uno de los agresores bajó de la unidad y persiguió a su víctima y le disparó tres veces por la espalda. Enseguida lo alcanzó su compañero y ambos huyeron. *** En la zona de Córdoba se reportaron al menos otros tres homicidios y la aparición de un cuerpo embolsado en el puerto de Veracruz. Todo sucedió el mismo día. *** Eso es lo que genera la percepción de peligro, eso y la pasividad de las autoridades.

filivargas@nullgmail.com