En el marco de la VII Asamblea General Extraordinaria de la Unión de Universidades de América Latina y el Caribe (UDUAL), la rectora de la Universidad Veracruzana (UV), Sara Ladrón de Guevara, reivindicó el papel que esta casa de estudios juega en la movilidad social de los jóvenes, subrayadamente para las mujeres y los indígenas.
Como parte de su participación en esta cumbre internacional de educación superior latinoamericana, en su carácter de rectora de la UV y vicepresidenta de la región México de la UDUAL, Sara Ladrón de Guevara debatió junto a Rolando Cordera Campos y Lorenza Villa Lever, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y Marcial Rubio Correa, rector de la Pontificia Universidad Católica del Perú, en el panel “Educación y movilidad social: vínculo roto”.
Al respecto, la Rectora aseguró que en la UV este vínculo no está roto. Lo anterior, explicó, se expresa en el origen socioeconómico de los estudiantes de la máxima casa de estudios de Veracruz, quienes representan la primera generación de universitarios en sus respectivos hogares en un porcentaje del 70 por ciento. Casi el 80 por ciento depende económicamente de sus padres y el 70 por ciento aún vive con ellos.
Pero más aún, dijo la Rectora, se expresa en el hecho de que el 50.09 por ciento de los estudiantes de la UV son mujeres. “El acceso de las mujeres a la universidad es importantísimo. Les da voz. Las empodera. Las universidades dieron movilidad social a las mujeres y permitieron este cambio fundamental en la sociedad”, dijo Sara Ladrón de Guevara.
Pero, además, la movilidad social que la UV permite –sobre todo al estado de Veracruz– se expresa en la atención a los estudiantes de origen indígena. A través de la Universidad Veracruzana Intercultural (UVI), una de las iniciativas más importantes de la UV en los últimos años, se ha logrado incoporar a la educación superior a jóvenes que tienen severas dificultades para concluir la educación media superior.
Al día de hoy, los estudiantes universitarios de origen indígena apenas representan el uno por ciento de la cobertura de la educación superior nacional. En consecuencia, Sara Ladrón de Guevara añadió: “Las universidades debemos seguir propiciando la movilidad social y considerarla no sólo en términos cuantitativos. La educación superior empodera a mujeres e indígenas. Debemos procurar la internacionalización tanto como la interculturalidad y sumar a éstas la equidad de género. Nuestros estudiantes han de saberse ciudadanos de pleno derecho y por ello en la UV aseguramos que el vínculo entre la educación superior y la movilidad social aún no está roto”.
Este debate se llevó a efecto en el Palacio de la Escuela de Medicina de la UNAM. El economista Rolando Cordera abrió la discusión asegurando que la conexión entre desarrollo social y desarrollo económico es poco más que complicada, tanto como resulta la ecuación en la que educación es igual a igualdad.
“La educación superior de hoy no es garantía de capilaridad social, no como se le pensó o imaginó. Necesitamos, en el sigo XXI, un nuevo proyecto universitario marcado por el compromiso social, la innovación y la relación estrecha en las universidades y sus comunidades”, señaló al respecto.
Los nuevos retos, dijo, los respresentan el papel de las universidades frente al Estado, la democratización sin sacrificio del rigor y la excelencia académica. Necesitamos “construir una voluntad colectiva de cambiar las reglas de los juegos corporativos. La educación no es una mercancía, tampoco puede ser prenda de intercambio político ni de poder”.
Por su parte, Marcial Rubio señaló que es necesaria una correcta disección de responsabilidades entre los gobernantes y las universidades y que los directivos universitarios han de evaluar si una de sus tareas es decirle a éstos aquello que es necesario decirles.
Rubio Correa también llamó a repensar los clásicos de la educación, a repensar la sociedad y retomar el arte del ensayo para incidir en ésta y señaló que las universidades, en muchos casos, han sacrificado el ensayo a favor de los rankings. “Peleamos por mantener las humanidades, sin éstas no se piensa la sociedad. Necesitamos las artes y la ciencia para reconfigurar la sociedad y transitar de lo disciplinarizado a lo interdisciplinarizado”.
La VII Asamblea General Extraordinaria de la UDUAL se efectuó los días 5 y 6 de abril en el Palacio de la Escuela de Medicina de la UNAM, en la Ciudad de México; se le considera la antesala por excelencia de la Conferencia Regional de Educación Superior (CRES) 2018 que se llevará a efecto en la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina.
Edgar Onofre/Prensa UV