El músico irlandés y líder de la banda U2, Bono, pidió hoy disculpas ante las acusaciones sobre presuntos casos de acoso surgidas en la organización no gubernamental One, que él contribuyó a fundar para combatir la pobreza.
Entre las alegaciones destapadas por el diario Mail on Sunday figura la de una trabajadora de la organización que asegura que se sintió presionada para mantener relaciones sexuales con un diputado de Tanzania.
Al rechazar esas presiones fue relegada a un puesto de secretaria y su sueldo fue recortado, explicó al tabloide.
Lo sentimos profundamente. Odio el acoso, no lo puedo soportar», señaló Bono en un comunicado en el que admite que el pasado noviembre supo que se habían registrado diversas acusaciones «graves» en las oficinas de One en Johannesburgo (Sudáfrica).
El músico detalló que le habían llegado «preocupaciones sobre baja moral y pobre gestión» en esa oficina, si bien asegura que no conocía las acusaciones que han «emergido recientemente».
Bono sostiene en la nota que el consejero delegado de One, Gayle Smith, ha tomado acciones «decisivas» para atajar el problema.
One fue fundada en 2004 como una organización sin ánimo de lucro para combatir la extrema pobreza y prevenir enfermedades en países del tercer mundo, especialmente en África.
El Mail on Sunday reveló que en febrero de 2015 un trabajador de la organización que abandonó su puesto envió un correo electrónico a los responsables de One en el que advertía sobre un ambiente «tóxico, poco profesional, dominado por el miedo, la intimidación y el acoso».
El director ejecutivo, por su parte, reconoció que una investigación interna determinó que existió una cultura de «acoso y desprecio» en la ONG entre 2011 y 2015.
«Los trabajadores recibían ofensas y algunos dijeron que su superior les ponía a realizar tareas domésticas en su hogar», afirmó Smith, que detalló que no se han «corroborado» las acusaciones de la mujer que asegura haber sido presionada para mantener relaciones sexuales.
Con información de Excélsior