Tratar de desacreditar la noticia que en exclusividad había dado este miércoles por la mañana en su noticiero de Televisa el periodista Carlos Loret, fue un grave error de cálculo político del gobernador Javier Duarte, ya que unas horas más tarde la propia Procuraduría General de la República (PGR) convocó a conferencia de prensa para confirmar oficialmente que había atraído dos indagatorias que se relacionan con investigaciones por enriquecimiento ilícito, peculado e incumplimiento de un deber legal en contra del mandatario veracruzano y varios de sus colaboradores.
Si Duarte de Ochoa suponía que la PGR no lo iba a evidenciar por la secrecía que el Ministerio Público federal estaría obligado a mantener en todo proceso penal, pues simplemente se equivocó, ya que debió haberse percatado que la filtración al conductor de “Despierta…” apuntaba precisamente hacia esa dependencia que encabeza la procuradora Arely Gómez, hermana de Leopoldo Gómez, vicepresidente de Noticieros Televisa y quien desde la sucesión presidencial de 2006 hasta diciembre de 2014 condujo el programa “Tercer Grado”, donde además de Loret participaban los periodistas Joaquín López Dóriga, Carlos Marín, Ciro Gómez Leyva, Denise Maerker y Adela Micha, en cuya última emisión, paradójicamente, hicieron una férrea defensa de la actriz Angélica Rivera, esposa del presidente Enrique Peña Nieto, implicada por esas fechas en un aparente conflicto de intereses por la adquisición de la llamada “Casa Blanca”.
Por eso, después de que Duarte empezó a tuitear que efectivamente agentes de la “@PGR_mx” habían estado “en #Xalapa” pero que “fueron a ver el tema de las propiedades de Miguel Ángel Yunes en #Veracruz”, asegurándole a Loret que “quien te pasó la información te engañó”, e insistiéndole en que “la visita de la @PGR_mx a Palacio de Gobierno fue para verificar el caso Yunes”, e inclusive atreviéndose a afirmar que “mi Secretario de Gobierno tiene copia de la actuación de ayer de la @PGR_mx en donde vinieron a indagar el caso Yunes”, se presume que de Televisa comenzaron a presionar a la Procuraduría para que desmintiera al gobernador de Veracruz, ya que los dejaba malparados al desacreditar la versión periodística desplegada por Loret esa mañana.
De ahí que no fue casual que por la tarde, en conferencia de prensa, el titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delitos Federales, José Guadalupe Medina Romero –quien dos días atrás había encabezado el operativo en Xalapa–, diera a conocer que sí se investigaban las propiedades y empresas en las que es socio el gobernador, y que la PGR había determinado atraer por conectividad, con la indagatoria que se tiene en el ámbito federal y en la que se investiga a Duarte de Ochoa, las dos carpetas de investigación que por esa causa abrió la Fiscalía de Justicia de Veracruz. Una es la número FESP/013/2016/1-04, por los delitos de enriquecimiento ilícito, peculado e incumplimiento del deber legal, constante de 10 tomos y 12 anexos, y la otra es la número FESP/216/2016/14-07, por los mismos delitos, constante de 4 tomos y 69 anexos.
Además, el subprocurador Medina Romero informó también que indagan a funcionarios veracruzanos por una posible filtración a la prensa sobre las pesquisas que desde hace tiempo la PGR lleva a cabo contra Javier Duarte. El funcionario federal se refirió a la nota publicada el 27 de julio por el diario Reforma en la que dio a conocer que la PGR indagaba a 35 empresas y 34 personas vinculadas con el gobernador, según datos que requirió la dependencia a la Dirección de Catastro y Valuación de Veracruz.
“Esta información motivó que, ese mismo día, la Unidad Especializada en Investigación de Delitos Cometidos por Servidores Públicos y contra la Administración de Justicia iniciara una carpeta de investigación (FED/SEIDF/ UNAI/VER/0000862/2016) a fin de establecer cómo fue que información de carácter ministerial se filtró, lo que es constitutivo de delito”, dijo el subprocurador, quien apuntó que, por ello, agentes del Ministerio Público de la Federación acudieron este lunes a dicha entidad para interrogar a los funcionarios del Gobierno de Veracruz que pudieran estar involucrados en el delito de filtración de documentos, entre ellos el director general de Catastro y Valuación, Domingo Yorio Saqui, quien pasó de testigo a indiciado.
Otro conductor estrella de Televisa, Joaquín López Dóriga –recién destituido de la titularidad del noticiario nocturno del canal de Las Estrellas, presuntamente a consecuencia del escándalo en que fue implicada su esposa, la cual fue demandada por una poderosa empresaria, ex socia de la televisora, que la acusó de quererla extorsionar con 5 millones de dólares junto con otros vecinos que se oponían a la construcción de un edificio de lujosos apartamentos en una elitista zona residencial de la Ciudad de México–, se lanzó con todo en contra de Duarte esa misma noche del martes: “¡Es el principio del fin. Va a tener que renunciar, ¿para qué?, para facilitar la investigación de las dos averiguaciones de la PGR!”, afirmó en el adelanto de su noticiero de televisión que transmite por su página digital “lopezdoriga.com”.
Sin embargo, la embestida de la PGR y Televisa no parece haber amilanado a Duarte de Ochoa, quien este jueves, en respuesta a la conferencia de prensa del subprocurador Medina Romero, respondió muy orondamente, ¡otra vez por Twitter!, que “el hecho de que @PGR_mx decidió atraer investigación de las denuncias que Yunes presentó en mi contra evita cuestionamientos en su resultado”.
¿Acaso la confianza mostrada por Duarte, de salir bien librado, se debe a que su caso estaría siendo utilizado por Televisa como la famosa “Caja China” de la película “La Dictadura Perfecta”? Y es que según el guión de este largometraje, una nota escandalosa difundida por la principal televisora en cadena nacional, tiende una cortina de humo sobre una desafortunada declaración del Presidente que se filtra a las redes sociales y afecta al poder presidencial, desviándola hacia otro personaje público de menor nivel –un gobernador protagonizado por el actor Damián Alcázar–, quien, a la postre, recurre a la misma estrategia y con la misma televisora, a cuyos ejecutivos y periodistas paga millones de pesos para ocultar su corrupción y llegar hasta la silla presidencial.
¿A poco a Javier Duarte lo están “linchando” sólo para levantar el rating del presidente Enrique Peña Nieto, cuya popularidad, por la serie de escándalos, ineptitud y errores políticos, anda por los suelos a menos de dos años de la próxima elección presidencial, para la que Televisa casualmente comenzó a promover este jueves en el programa de Loret a Margarita Zavala, esposa del ex presidente Felipe Calderón, y al gobernador saliente de Puebla, Rafael Moreno Valle, dos abiertos aspirantes del PAN?