Quienes conocen de cerca los entretelones de Acción Nacional en Veracruz afirman que en los próximos días, cuando Miguel Ángel Yunes Linares se registre como precandidato al gobierno del estado, se producirá una salida de militantes ese partido.
No se esperan demasiadas sorpresas, pero se sabe que los fieles de dos aspirantes independientes, Gerardo Buganza y Juan Bueno, comenzarán a renunciar a su militancia panista en los días próximos.
Esta semana, antes del sábado, el blanquiazul emitirá la convocatoria correspondiente. Yunes Linares será el único aspirante en registrarse y se convertirá en candidato de la alianza PAN-PRD. Será en ese momento, por cuestiones de estrategia, cuando algunos panistas, cuadros más o menos importantes, comenzarán a renunciar a su militancia. También lo harán ex dirigentes del panismo.
Uno se ellos, nos platican, será Víctor Alejandro Vázquez Cuevas, “El Pipo”, quien mantiene diferencias con el virtual candidato de Acción Nacional.
“Pipo” Vázquez fue diputado local y dirigente de ese partido; coordinó varias campañas políticas en Veracruz, como las de Luis Pazos y Gerardo Buganza. Sin embargo, sus días de participación política más o menos destacada han quedado en el pasado.
Su salida del albiazul ya está cantada. En noviembre del año pasado, Vázquez Cuevas sostuvo una reunión con el virtual abanderado del PRI-Verde al gobierno del Estado, Héctor Yunes Landa, en la que también estuvo el dirigente de Alternativa Veracruzana, Alfredo Tress Jiménez. De acuerdo con fuentes internas del PAN, “Pipo” Vázquez tiene un pie fuera del partido; y cuando se oficialice la candidatura de Yunes Linares, el ex también ex dirigente de AN en Quintana Roo convocaría a rueda de prensa para criticar la designación y anunciar la renuncia a su militancia, que únicamente tendrá efectos mediáticos, porque Vázquez Cuevas tiene años que se mantiene al margen de la actividad interna.
Poco perderá Acción Nacional porque en estos momentos, Víctor Alejandro Vázquez ya no representa la misma fuerza que hace una década, sobre todo tomando en cuenta que la estructura que manejó ya no está vigente; por eso su salida tiene sin cuidado al equipo de Yunes Linares, que hoy tiene otras prioridades, la estrategia, la estructura, el mensaje, el tono del discurso y la agenda.
Hay otros actores al interior del blanquiazul que sí podrían representar cierto nivel de peligro y en ellos se concentran los esfuerzos del equipo de Miguel Ángel Yunes para lograr un frente común de cara a la presente sucesión. Son, por ejemplo, los casos de Enrique Cambranis Torres, ex dirigente del PAN en Veracruz, quien se sumará a la candidatura del jefe del llamado grupo Boca del Río; o de Víctor Serralde Martínez, ex diputado federal de fuerte presencia en la zona de Huatusco, con quien el diálogo marcha lento.
Son esos los liderazgos que sí podrían preocupar al equipo de campaña, porque cuentan con peso e influencia entre la militancia; lo de Víctor Vázquez es, más bien, una salida anunciada; lo más probable es que “El Pipo” termine trabajando para Héctor Yunes Landa.
Oaxaca, clara tendencia a la izquierda
En Oaxaca, estado que rompió la hegemonía priista en 2004, la alianza entre los partidos Acción Nacional y de la Revolución Democrática está cada vez más cerca.
Los últimos gobiernos estatales abrieron las puertas a la primera derrota priista en la historia estatal. Por hartazgo social y por encabezar un proyecto que incluía a PAN, PRD, PT y Convergencia, Gabino Cué Monteagudo ganó las elecciones de 2010.
Hoy, la posibilidad de que se repita en Oaxaca una alianza entre PAN y PRD otra vez está cerca.
José Antonio Estefan Garfias podría encabezar esa suma de partidos; se trata de un político perredista de la zona de Tehuantepec, que mantiene nexos con el actual gobernador, con quien colaboró en la Secretaría del Transporte.
Estefan Garfias se enfrentará, paradójicamente, al cansancio social que en Oaxaca ya generan las coaliciones, y a un candidato del PRI que podría salir de la terna que integran Alejandro Murat Hinojosa, hijo del ex gobernador José Murat; Eviel Pérez Magaña, en su segundo intento; y Gerardo Gutiérrez Candini, expresidente del Consejo Coordinador Empresarial y de la Coparmex en esa entidad, donde este sábado 23 arrancará el proceso interno del PRI, con la expedición de la convocatoria.
Oaxaca es una entidad que en los años recientes se le ha complicado al PRI. En el proceso federal electoral de 2015, por ejemplo, el tricolor no llegó al 30 por ciento de los votos, aunque se convirtió en la primera fuerza política, con 8 de las 11 diputaciones en disputa; por otro lado, el PRD se ubicó en el 20 por ciento y ganó en 3 distritos; Morena alcanzó 14 puntos porcentuales. En ese estado, el PAN fue relegado al cuarto lugar, con el 10 por ciento.
Por la tendencia de los procesos recientes se infiere que el PRI pierde cada vez más gas en Oaxaca, un estado con evidente tendencia hacia la izquierda; sin embargo, al no presentar PRD y Morena un candidato común, sus posibilidades de triunfo podrían diluirse. @luisromero85