Aunque hasta ahora Jorge Carvallo Delfín no ha expresado abiertamente sus aspiraciones por la gubernatura de dos años que se disputará en junio próximo, tampoco el diputado federal por Los Tuxtlas ha salido a frenar los pronunciamientos públicos que algunos de sus lacayos comenzaron a realizar al inicio de esta semana.
Primero fue Julián Organista Barranco, coordinador distrital del Partido Verde Ecologista de México, quien el pasado lunes 4, en San Andrés Tuxtla, “destapó” en conferencia de prensa a Carvallo Delfín como candidato del PVEM para suceder en 2016 al gobernador Javier Duarte de Ochoa.
“Nosotros como partido, quién venga, lo vamos a apoyar; pero para nosotros, como equipo político, nos inclinamos hacía Jorge Carvallo Delfín como nuestro próximo candidato a gobernador”, declaró el dirigente del Partido Verde en el distrito electoral federal XIX, quién se ostenta como amigo del dirigente estatal Juan Eduardo Robles Castellanos y del diputado federal plurinominal del PVEM, Javier Herrera Borunda, hijo del ex gobernador priista Fidel Herrera Beltrán, en cuyo mandato Carvallo fungió como su secretario particular.
Según Organista Barranco, el diputado federal de Los Tuxtlas reúne todas las características necesarias en un buen candidato. “He tenido la oportunidad de trabajar de cerca con mi amigo Carvallo, de conocerlo como ser humano, de ver su forma de establecer compromisos con la gente, y lo mejor, de ser testigo de cómo Jorge Carvallo es un hombre que genera consensos y acuerdos, que en política son muy importantes para darle rumbo, certeza y gobernabilidad a Veracruz”, dijo el representante distrital del PVEM.
Luego del pronunciamiento de Organista se filtró la versión de que Carvallo contaba hasta con el respaldo del dirigente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, y con el del presidente Enrique Peña Nieto, con quien “lo une una sólida amistad”, por lo que se anticipaba que al día siguiente, martes 5, el legislador de Los Tuxtlas sería “destapado” oficialmente en Xalapa por uno de los sectores más importantes del partido tricolor.
Pero en esa fecha y hasta el momento ninguno de los dirigentes de los tres principales sectores del PRI salió a pronunciarse por Carvallo. Ni la CTM, ni la CNC y tampoco la CNOP. Igualmente los líderes juveniles y femeniles del partido tricolor hicieron mutis.
La única que siguió la farsa fue Sandra Angélica Soto Rodríguez, quien se ostenta en Veracruz como presidenta de la Asociación Nacional de la Unidad Revolucionaria (ANUR), un membrete partidista que no tiene realmente gran peso político en la entidad.
Soto se pronunció a favor del ex secretario de Desarrollo Social del estado porque, dijo, “siempre he creído que la escuela de gobernanza tiene que ver con la visión de futuro, y si alguien ha impulsado esa escuela y políticas públicas para el futuro ha sido Carvallo, no sólo como administrador sino que como dirigente del partido que hizo modificaciones sustanciales”.
Este miércoles 6, en la ceremonia conmemorativa de la promulgación de la Ley Agraria de 1915, coincidieron en el puerto de Veracruz el dirigente del CEN del PRI, Manlio Fabio Beltrones, y el presidente Peña Nieto, el “amigo” de Carvallo, pero ninguno de los dos mandó señales a favor del diputado federal de Los Tuxtlas.
Otro que ha hecho eco de las disparatadas aspiraciones del legislador sureño ha sido su padre Jorge Carvallo Hernández, pero lamentablemente en contra de su causa. Y es que a través de su cuenta de Facebook, el progenitor del diputado priista le mandó un pésimo “regalo” en el mero Día de Reyes: exhibió su acta de nacimiento para demostrar que su hijo no nació en la cabecera municipal de Lerdo de Tejada, Veracruz, como siempre ha sostenido, sino en el Distrito Federal, el 26 de mayo de 1974, por lo que afirma que su vástago, a quien ha acusado también de saqueador y de enriquecimiento inexplicable, estaría impedido legalmente para ser gobernador.
Sin embargo, el padre de Carvallo Delfín podría estar equivocado, ya que el Artículo 116 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos –reformado mediante Decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación el 26 de septiembre de 2008– estipula claramente en uno de sus párrafos que “sólo podrá ser Gobernador Constitucional de un Estado un ciudadano mexicano por nacimiento y nativo de él, o con residencia efectiva no menor de cinco años inmediatamente anteriores al día de los comicios, y tener 30 años cumplidos el día de la elección, o menos, si así lo establece la Constitución Política de la entidad federativa.”
Por ese lado Carvallo Jr. no tiene problema porque está habilitado constitucionalmente para ser candidato a gobernador, pues aunque no haya nacido en la entidad es hijo de padres veracruzanos y puede acreditar también los más de cinco años de residencia efectiva en el estado que se exigen previos a la elección. Sin embargo, la gran interrogante es si hasta con su progenitor en contra, él puede ser el candidato idóneo para unir a todos los grupos y corrientes internas del PRI y garantizar la continuidad del priismo que ha gobernado 86 años la entidad y que se ve seriamente amenazado por la virtual alianza PAN-PRD y por tres aspirantes independientes que buscan echarlos del poder.