Aníbal del Rey Alvarado se reconoce como un caminante enamorado de la fotografía que vive visualmente su día a día documentando todo lo que ve, sea una planta, un perro, un niño o hasta el mismo aire.

«Todo el tiempo hago foto, no se hacer nada más y me hace muy feliz, me llena de alegría, encontré la profesión adecuada, me despierto y mi día y mi andar es verlo todo como una imagen y lo hago con muchísimo amor».

Minneapolis

Nativo de Poza Rica y egresado de la Facultad de Artes de la Universidad Veracruzana (UV), con 15 años como profesional, inauguró este fin de semana en «Mala Vibra Café» la exposición fotográfica «Relatos de un caminante enamorado: Minneapolis», un compendio de la cotidianidad de la ciudad más poblada de Minnesota, Estados Unidos.

«Estuve un rato por ahí, no conocía a nadie, me dije ¿Que hago? agarré mi cámara, solo me llevé un lente de 50 mm, y me fui al centro de la ciudad, era invierno, hacía mucho frío y no había nadie, el resultado es foto de la cotidianidad, es un andar en el centro de Minneapolis».

Comenta que este proyecto forma parte de otro más grande y ambicioso en espacio llamado «Relatos de un animal enamorado», que comprende desnudos masculinos evolucionados con el paso del tiempo y con más ciudades incluidas porque «me considero un caminante, un peregrino y quiero que me recuerde así la gente».

Documentar, una obligación

Aníbal del Rey relata que a partir de que trabajó en una revista de sociales se dio cuenta que su obligación era documentar todo lo que pasa en la ciudad y dejarlo grabado para siempre.

En pandemia el trabajo no le faltó porque, aunque mucha gente la pasó mal, se dedicó a tomar retratos y fotografías de la gente confinada en sus casas y actualmente da clases de fotografía de moda: «Hago foto para mí, para vender y doy clases de foto».

Reconoce a Miguel Fematt como su maestro de desnudo en la Facultad de Fotografía y quien le inculcó este arte, en tanto que la clase de retrato con el maestro Oscar Martínez le abrió la mente para entrar de lleno en la fotografía documental, «es de las partes que me emocionan y me inspiran».

Y como maestro de fotografía celebra que exista un boom en una ciudad como Xalapa en donde abunda el arte.

«Cada seis meses tengo grupo nuevo, nutrido de talentos, no solo los que toman su cámara, son gente que tiene ojo y les falta aprender la técnica, ya sea por boom, moda, curiosidad o talento, la banda sigue intentándolo, dicen que en Xalapa levantas una piedra y sale un fotógrafo, creo que es bastante cierto…».

AVC

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