Dicen los morenistas que “amor con amor se paga”. Tal vez por eso, el gobierno de Claudia Sheinbaum ya prepara para fin de año el despido de miles de burócratas para tratar de ahorrar una lana y enfrentar el desmadre financiero que le dejó el nuevo huésped de La Chingada.
Resulta que las cuentas no salen y el dinero no alcanza. López Obrador dejó un déficit fiscal del 6%, el más alto de la historia. No hay ni para las copias, pues.
Entonces, para mantener intactos los programas sociales y la clientela electoral, una de las primeras ideas que se le vino a la cabeza ha sido correr a miles de empleados del gobierno federal, los mismos que abarrotaban los mítines de Sheinbaum en todo el país y que fueron invitados a votar por Morena para mantener sus empleos. Pues los timaron.
La Secretaría de Hacienda ya tiene listo el plan para reducir 10% el presupuesto de la nómina del gobierno federal. El gasto anual por ese concepto ronda los 2 billones de pesos, por lo que un recorte como el que ya se empezó a notificar implicaría un ahorro de aproximadamente 200 mil millones de pesos anuales.
Ese monto de saque y con cargo a miles de empleos que serían afectados en la estructura gubernamental del segundo piso de la 4T, representa apenas alrededor de un 0.64% del PIB.
El ajuste también vendrá en el recorte de sueldos de quienes logren sobrevivir. Sueldos de la baja burocracia que ya se habían reducido a la mitad o menos durante el gobierno de López Obrador. Mientras, la burocracia dorada, la de los amigos y parientes, seguirá gozando de los privilegios de siempre.
La austeridad nunca ha sido democrática. Así que muchos morenistas tendrán que ir buscando chamba donde no la hay.
Lo que faltaba: fiscalía y funcionarios Involucrados en trata de personas
El final del gobierno de Cuitláhuac García no podía ser más desastroso. Una espiral de violencia imparable, el puerto de Tuxpan prácticamente sitiado, ejecuciones todos los días en varias regiones del estado, un estado cada vez más endeudado, sin dinero para atender desastres naturales, además de los escándalos de corrupción y nepotismo.
Lo único que faltaba es que involucraran a funcionarios del gobierno del estado a través de la Fiscalía – ¿alguien sigue pensando que se trata de un órgano autónomo? -, en una red de tratantes de blancas, cuya cloaca se destapó con la reciente desaparición de un grupo de adolescentes colombianas.
La historia está así. Resulta que a las seis jóvenes colombianas privadas de la libertad fueron víctimas de explotación sexual y rescatadas en la zona turística de Veracruz-Boca del Río.
A ellas les prometieron un trabajo de modelaje y la mujer que presuntamente las enganchó colaboraba en el Centro Integral de Justicia para las Mujeres del Gobierno estatal, por lo que el gobernador Cuitláhuac García salió a “curarse en salud” e informó que la implicada sólo había hecho su servicio social en esa dependencia y fue hace tiempo, aunque algunos señalan que el caso sí “le metió un gol”, como lo publicó un medio nacional.
Si no hubiera sido por la intervención directa de las autoridades de aquél país, seguramente estaríamos hablando de una nueva masacre, consecuencia del contubernio de la autoridad con la delincuencia organizada.
Pero no fue el único caso. Hay otro asunto muy similar de una venezolana desaparecida que tenía una relación sentimental con un funcionario veracruzano y todo quedó escondido. Caso cerrado para la Fiscalía, a menos claro, que el gobierno de Maduro despierte y busque a su ciudadana.
Morena detiene reforma del PJ; reforma judicial no es caso cerrado
Es una historia para contarse. La Suprema Corte de Justicia, gracias a una reforma a la Ley Orgánica del Poder Judicial promovida por el entonces presidente de la Corte Arturo Zaldívar y hoy un encumbrado morenista, Arturo Zaldívar, sí puede decidir sobre los cambios que vulneren su autonomía y el equilibrio de poderes.
La Corte resiste con las armas que Morena se había guardado en caso de no obtener la mayoría en el Congreso y tener que defender en la SCJN las decisiones arbitrarias tomadas por el presidente y hoy por la presidenta. Ellos mismos sembraron el huevo de su serpiente.
Según el artículo 11 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que se reformó el 7 de junio 2021 bajo la presidencia de Arturo Zaldívar, señala que el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación “velará en todo momento por la autonomía de los órganos del Poder Judicial de la Federación y por la independencia de sus integrantes”.
Eso es precisamente lo que hoy intentan hacer ocho de los once ministros que votaron a favor de atraer la consulta presentada por jueces y magistrados para que los ministros del Máximo Tribunal analicen si tienen facultades para frenar o modificar la reforma judicial que establece la elección de juzgadores por voto popular.
Además, los ministros reconocieron la facultad expresa de la fracción XVII de este mismo precepto, relativa a conocer y dirimir cualquier controversia suscitada en el Poder Judicial de la Federación. Y la controversia existe.
Por supuesto, esto enfureció a la presidenta Claudia Sheinbaum, quien, en lugar de preparar una argumentación jurídica, ha utilizado la misma receta de su pastor: descalificar a los ministros por realizar su trabajo.
En “mañanera del pueblo” declaró que “no tiene sustento” lo que decidieron ocho ministros y ministras y acusó que los ministros “saben que lo que están haciendo, está mal”.
Aseguró que “en ningún lugar de la Constitución dice que la Corte puede cambiar la Constitución o puede declarar inconstitucional lo que ya fue declarado constitucional”, aunque esto último es precisamente la función de la Suprema Corte de Justicia.
Y arremetió con el mantra morenista: “A la transformación, que es una decisión del pueblo de México, no la pueden parar ocho ministros de la Suprema Corte de Justicia”.
Lo cierto es que nada está definido. La reforma al Poder Judicial sigue en pie porque jurídicamente existe. Sin embargo, La posibilidad de que se anule y se suspenda el proceso para la elección de ministros, magistrados y jueces también. Estaría a punto de suceder.
De hecho, un tribunal colegiado confirmó la resolución que ordena al Instituto Nacional Electoral (INE) se abstenga de implementar el proceso electoral judicial, 2024-2025 para la elección de jueces, magistrados y ministros, además de emitir acuerdos para la organización, desarrollo, cómputo, vigilancia y fiscalización.
Lo curioso es que hay voces dentro del gobierno de Morena –Marcelo Ebrard es una de ellas, acusan- que ven con buenos ojos que la reforma se detenga. Eso evitaría fuga de capitales y aseguraría mayor inversión para un gobierno sin dinero.
El tema es que la presidenta debe mantenerse firme en la defensa pública de la reforma propuesta por López Obrador… aunque por las noches actúe como Penélope.
¿Para qué alcanzan 18 mil millones de dólares?
En el primer día de su gobierno, Claudia Sheinbaum se echó el tiró de emitir bonos de deuda por 18 mil millones de dólares, algo así como 360 mil millones de pesos. Eso es una cantidad brutal, que sólo se justifica porque López Obrador no les dejó un varo en caja.
Esa cantidad equivale, por ejemplo, a 3 veces el presupuesto anual de Veracruz o hasta 6 veces la deuda impagable del estado. Son 40 mil millones más de lo que costó la refinería de Dos Bocas. Es seis veces el presupuesto de la UNAM, la Universidad más grande del país.
El tema es que, con el país en quiebra, el presidente López Obrador no se quiso echar el tiro de pedir el préstamo, así que ordenó a su Secretario de Hacienda –ratificado por Sheinbaum- que emitiera la deuda pública al día siguiente de entregar el poder.
Pero, ¿para qué pidieron préstamo tal cantidad de dinero? Dijeron que para enfrentar el brutal déficit fiscal de 6 por ciento y volver a rescatar, por enésima vez, a Pemex.
A finales del primer semestre de 2024, los pasivos a corto plazo de Pemex fueron de 19.8 mil millones de dólares, más del doble de los 9.5 millones reportados al inicio de la administración en 2018. Además, Pemex reportó pérdidas históricas de 261 mil 741 millones de pesos en refinación durante el primer semestre de 2024.
Además, en este último año del gobierno López Obrador alcanzó un déficit de 5.9% del PIB que será el más alto registrado al menos desde el año 2000. Según datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), entre enero y agosto el déficit fiscal de México asciende a más de ¡897.8 mil millones de pesos!
Entonces la lana no va a ir a parar a hospitales, servicios de salud, medicinas, vacunas, escuelas, carreteras y autopistas, seguridad y justicia, inversión pública, sino para pagar la juerga de López Obrador y la montaña de dinero que invirtieron para ganar la elección presidencial.
La deuda mexicana es la nueva consentida de Wall Street, convirtiéndose en el país que más deuda tiene circulando en mercados internacionales.
¡Quién lo diría! Morena alimentando a manos llenas a la banca internacional.
La ratonera
¿En verdad era necesario exponer a la ilustrísima Ifigenia Martínez para cumplir la voluntad de Claudia Sheinbaum de que fuera ella quien le entregara la banda presidencial? El espectáculo sobre su deteriorado estado de salud fue lamentable. Doña Ifigenia falleció la noche del sábado. ¡Qué pena!
Ya veraz otra vez México 🇲🇽 como tus falsos profetas como el malo te dejaran las cajas vacías del Dinero y las cajas llenas de los MUERTOS POBRE MEXICO NO SALE DE UNA DESGRACIA COMUNISTA. PARA CAER EN OTRA. LE DIJO LA MULA AL FRENO