Es muy complicado llegar al poder político, pero lo es más sostenerse, porque gobernar y el ejercicio de ese poder desgasta, lleva a cometer errores graves, a caer en la corrupción, a actuar autoritariamente y a seguir intereses alejados del pueblo.

Lógicamente Morena quiere mantenerse como gobierno, pero ahora que ha dado a conocer su listado de candidatos a las diputaciones federales muestra sus debilidades producto del ejercicio del poder.

Para los 19 distritos del Estado de Veracruz -está pendiente la decisión en la demarcación de Cosoleacaque- hay varios candidatos que son débiles porque más allá de que lograron la nominación principalmente por intereses de grupos, ya le mostraron a los veracruzanos que no les sirven como legisladores.

Encabeza esa lista el diputado Rafael Hernández Villalpando, quien va por su tercera reelección. Son prácticamente seis años de no hacer nada, pues ha ganado dos veces y se desaparece.

Dice que un diputado no está obligado a realizar gestiones y que su labor principal es aprobar el presupuesto de la Federación, así como leyes.

Por eso después de ganar se la pasa en la CDMX o al menos no se le ve en Xalapa.

Tendrá de rival a Américo Zúñiga, quien será el candidato de la oposición. ¿Por tercera vez consecutiva los xalapeños votarán por quien se desaparece tras ganar las elecciones?

Un caso parecido es el de Paola Tenorio, quien también, por Morena, va por su tercera reelección, ella por el distrito de San Andrés Tuxtla.

No se le conoce alguna gestión para sus representados ni alguna iniciativa legislativa que incida en la zona de la suiza veracruzana.

Hija de un médico que es amigo de López Obrador, su único cargo antes de ser diputada fue directora del DIF de San Andrés Tuxtla, cuando su entonces esposo fue alcalde.

Ahora, dicen paisanos suyos, volverá a buscar que el efecto AMLO la haga por tercera vez diputada.

Tenorio está identificada como gente del candidato a senador y exdelegado de Bienestar, Manuel Huerta, como igualmente lo está el candidato por Coatepec, Adrián González Naveda.

También del grupo de Manuel Huerta, Rosa María Espejo va por su reelección en el distrito de Veracruz, donde las condiciones serán distintas a las de 2021.

María del Carmen Pinete, por el Verde-Morena, es la candidata en el distrito de Pánuco. Ligada al fidelismo, todo hace ver que su intención de ser nuevamente legisladora será complicada. Tendrá que vencer a la hermana de Joaquín Guzmán Avilés.

Igual tendrá una elección difícil la candidata de Morena por el distrito de Martínez de la Torre, Mónica Herrera, hija de una lideresa de colonos de Tlapacoyan.

Y lo mismo sufrirá (por Boca del Río) Byron Barranco, un cantante que lo mismo ha compuesto canciones para el fidelismo que ahora para la 4T.

En el listado es notorio que el exdelegado de Bienestar sí pudo meter mano y que le hicieron caso en varias de sus propuestas.

También es notorio que solo Zenyazen Escobar representa al gobernador Cuitláhuac García. No hay ningún otro candidato o candidata ligada a quien ya le queda poco en su cargo, ni Dorheny García Cayetano ni nadie más. Un solo candidato; igual a Sergio Gutiérrez le dieron una candidatura.

Traducción: para las candidaturas a las diputaciones locales no esperen algo diferente. Si acaso habrá una posición para quienes están identificados con el Gobernador.