Hace cinco días en Boca del Río, el senador panista Julen Rementería oficializó su adhesión a la candidatura de Pepe Yunes como abanderado de la Alianza por Veracruz a la gubernatura y se tomó la foto con el peroteño. Julen aprovechó el viaje para urgir a su partido a que antes del 2 de enero se materialice la coalición PAN, PRI y PRD y Pepe comience su precampaña sin contratiempos.

Solo que en el PAN siguen deshojando la margarita, o mejor dicho, su líder estatal Federico Salomón, sigue terqueando en que su partido debe esperar los tiempos.

Quizá por eso Julen le reviró: “Dado que el único que levantó la mano en el PAN para poder ser candidato a gobernador soy yo. Por eso el llamado que le hago a mi partido a que hagamos la alianza ya… junto con un muy buen candidato: Pepe Yunes”.

Cuando ya todo está listo porque el PRD y PRI están puestos, la sociedad civil está más que puesta, lo mismo que los militantes panistas y hasta Joaquín Guzmán Avilés (dueño de una de las dos mitades del PAN) está puestísimo con su apoyo a la inminente candidatura de Pepe Yunes, no deja de ser irónico que el único que desentone sea Federico Salomón.

A finales de noviembre dijo: “Nosotros estamos en nuestra etapa interna y en los próximos días voy a platicar con los representantes del PRI y del PRD para ver cómo, en caso de darse la coalición, cuál sería el mecanismo de elección”.

De los partidos y partiditos políticos que existen en este país, el PAN tiene procedimientos muy estrictos para elegir a sus candidatos. Lo que hace la dirigencia en estos casos es que primero consulta con sus delegados, luego fija una fecha para que se reúnan con el Consejo Político Estatal. Pero para cuando esto suceda (por ahí del mes de febrero) la candidata de Morena, Rocío Nahle, ya le llevará un mundo de ventaja a Pepe.

Si Julen Rementería tuviera en el PAN la aceptación que tiene Pepe en el PRI y el PRD, y si además de eso manifestara su abierto interés en competirle al peroteño, entonces sí tendría Federico Salomón todo el derecho de pelear por la candidatura de su militante. Pero si éste ya declinó a favor de José Francisco y lo está urgiendo a que asuma la misma postura ¿qué está esperando Federico?

Cuando faltan seis días para el 2 de enero, no se ve por dónde el avinagrado dirigente del blanquiazul manifieste su apoyo a José Yunes, a pesar de que ya lo hizo Marko Cortés y la propia Xóchitl Gálvez cuando estuvo en Perote y en Boca del Río.

Y aunque al final sucederá lo inevitable; que Pepe Yunes sea candidato de la oposición, no deja de molestar a la raza jarocha la necia postura de un gris burócrata como Federico Salomón, que quizá lo que está buscando son sus cinco pinchurrientos minutos de fama.

Si así es, vaya maneras las suyas.

PD.

A quienes me han preguntado cómo vi a Veracruz en este 2023 les contestaré el viernes y no mañana por una razón muy obvia; porque mañana es Día de los Santos Inocentes.

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