Todas las generaciones de la Elite Way School se reunieron para decirle adiós al grupo que hizo posible que existieran. El Estadio Azteca se llenó de corbatas y sacos rojos y sombreros rosas. RBD culminó su gira “Soy Rebelde Tour 2023” y nadie podía faltar.

Tras 15 años la promesa se cumplió, la agrupación pudo despedirse en su país, en un lugar emblemático y con su gente. El tiempo pasó, pero en lugar de que el amor y la admiración por este grupo se los llevara el viento, se hicieron más fuertes. Esta noche se notó.

Hace 15 años, el 21 de diciembre de 2008, el grupo conformado por Anahí, Dulce María, Maite Perroni, Christopher Uckermann y Christian Chávez —en ese entonces también Alfonso Herrera— no pudo hacerlo en México, su adiós lo hicieron en el antiguo Palacio de los Deportes de Madrid ante 15 mil espectadores.

Los cinco integrantes expresaron su emoción y gratitud por el cariño de la gente. Hubo lágrimas y muchas risas. “Viva México, cabrones”, se escuchó y la gente confirmó con aplausos y chiflidos. “Tras de mí”, “Un poco de tu amor”, “Aún hay algo”, “Otro día que va”, “Enséñame”, “Ser o parecer”, “Este corazón”, “Siempre he estado aquí” y “Solo quédate en silencio”, fueron algunos de los temas que resonaron en el “Coloso de Santa Úrsula”.

Mensajes poderosos

Christopher Uckerman enamoró a todos los presentes con su solo. Al piano interpretó “Inalcanzable”. A su voz se unieron las más de 80 mil que había en el lugar para juntas cantar: “Inalcanzable como estrella tan distante, un amor casi imposible, invisible como el aire, eres tan inalcanzable, tan sublime como un ángel…”.

Christian Chávez salió al escenario con su icónico traje de charro rosa. Habló de como a sus 21 años lo sacaron del clóset y lo avergonzaron, pero no más. A sus 40 años, dice sentirse orgulloso de quien es, de la libertad que tiene, de ser un “mariposón” que tiene alas para volar, “un puto” que tiene la fuerza para romper estereotipos y marcar camino.

Mientras tanto, Dulce María pidió defender la libertad, gritar fuerte por si te quieren callar, no perder la fe y seguir adelante. “No te rindas nunca, siempre alza la voz, lucha fuerte y sin medida, no dejes de creer. No te quedes con tu nombre escrito en la pared, en la pared. No pares, no pares, no, no pares nunca de soñar”, cantó y su publicó la cobijó entre aplausos y ovaciones.

Maite Perroni motivó a empezar desde cero, a tomar las segundas oportunidades, a no tener miedo y reinventarse. La cantante agradeció la fidelidad, el amor, la paciencia y la entrega que sus fans han mostrado en cada concierto.

La parte más esperada fue “Sálvame” con Anahí, quien descendió de una estrella portando una playera verde con la leyenda: “la última y nos vamos”. Las lágrimas corrieron, y los besos aparecieron, fue el momento más sublime e íntimo que se vivió durante el concierto. Todos sabían que, por ahora, era el final.

La noche se coronó con fuegos artificiales. Los cinco cantantes se unieron en un abrazo que fue replicado por todos los presentes. “Rebelde” sonaba y la gente brincaba, porque cómo dice la banda: “RBD morirá hasta que el último corazón rebelde se extinga”. Así se vivió el último concierto de “Soy Rebelde Tour 2023”.

Reporte indigo

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