Para el siguiente año el gasto en subsidios alcanzará los 1.1 billones de pesos, cerca de tocar el récord en 2015, por tan solo una diferencia de apenas 3% frente a lo gastado hace ocho años.
Aunque en 2024 se superará por poco el monto más elevado en subsidios de 2015, la estructura del gasto será completamente diferente, detalla un análisis de México Evalúa.
“En 2015 se registraron 184 programas, y el de mayor valía –subsidios para Organismos Descentralizados Estatales– concentró 125,000 millones de pesos o 12% del total. En cambio, en 2024 habrá sólo 72 programas de subsidios, y el de mayor valía será la Pensión para de Adultos Mayores, con 465,000 millones, o 41.8% del total”, detalla el análisis.
Pese al crecimiento de lo aprobado por arriba de 2023, el gasto en subsidios estará concentrado en las Pensiones de Adultos Mayores, dejando al descuido otros sectores como el de educación, salud o seguridad.
Recursos concentrados
Un análisis realizado por México Evalúa considera que el gasto en subsidios tendrá un fuerte componente electoral el siguiente año, pues del total de los 1.1 billones de pesos, 465,000 millones serán para el programa de Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores, lo que representa 41.8% de los subsidios, y un crecimiento de 871% en comparación con 2018.
“Nunca en la historia un programa había alcanzado tal concentración. Al mismo tiempo, el resto de programas, incluso los considerados prioritarios, permanecerán estancados”, refiere el documento.
La apuesta por incrementar sólo las pensiones asistenciales, a costa de castigar a otros programas, agudizará la regresividad de la política social. El carácter universal de este programa provoca que los recursos lleguen no sólo a las personas más necesitadas, sino también a los deciles de mayores ingresos, lo que reduce la capacidad de la política social para reducir la pobreza y desigualdad.
Visto de otra forma, al cierre del sexenio, el gasto en subsidios dedicados a la agricultura, las corporaciones de policía, ciencia y tecnología, educación, protección ambiental, cultura, salud o vivienda será mucho menor al observado en 2018. Asimismo, por primera vez en 2024 el gasto en subsidios presupuestados (1.1 billones), serán mayores a la inversión física (889,000 millones).
Dar prioridad a un solo programa de subsidios ha tenido un alto costo: el resto de los programas y funciones del gasto se quedarán estancadas frente a 2023, y frente al fin del sexenio pasado. La gran mayoría presenta un retroceso.
México Evalúa destaca que, de 72 programas aprobados en 2024, tan sólo seis tendrán incrementos superiores a 10%, sin contar a la Pensión para Adultos Mayores. Se destaca un aumento de 64% (592 millones) en el programa a la Atención Médica, 37% (240 millones) en Prevención y Control de Sobrepeso, Obesidad y Diabetes, o 31% (194 millones) en el programa de Vigilancia Epidemiológica.
Por el contrario, hay un recorte de 71% (928 millones) en el Programa Nacional de Reconstrucción, 36% (2.5 mil millones) en el Programa de Mejoramiento Urbano y 27% (980 millones) en el Programa de Agua Potable, Drenaje y Tratamiento. Por otro lado, hay 55 que sólo tendrán un aumento nominal, para mantener los mismos recursos que en 2023; es decir, que tendrán un crecimiento de 0% real para el siguiente año.
Además, ninguno de los otros programas prioritarios del presente gobierno tendrá aumentos para 2024.
Por ejemplo, el programa de Becas Benito Juárez para Educación Básica (el cual, por cierto, es bastante progresivo) contará en 2024 con 36,600 mil millones, el mismo monto que en 2024. Las Becas Benito Juárez para Educación Media tendrán 39,400 millones, lo mismo que este año. La Escuela es Nuestra mantendrá su presupuesto en 28,800 millones, y Sembrando Vida se quedará con 38,900 millones, igual que en 2023.
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