Prefacio.
El informe del Órgano de Fiscalización Superior (Orfis) sobre la revisión a la Cuenta Pública 2022, arroja daños realmente alarmantes. *** Del universo global de auditorías, el órgano fiscalizador detectó un presunto daño patrimonial por mil 503 millones 890 mil pesos. *** De todo ese recurso que -se presume- pudo haber sido malversado, mil 305 millones 891 mil pesos corresponden a las auditorías a ¡195 ayuntamientos!, en lo que corresponde al primer año de las actuales administraciones municipales. *** Esto es: de los 212 ayuntamientos, sólo 17 de ellos no presentaron irregularidades que permitan suponer la existencia de daño patrimonial. *** Entre los ayuntamientos que presentan inconsistencias por un mayor monto, destaca Medellín de Bravo (cuyo alcalde es Marcos Isleño) por poco más de 84 millones de pesos; le sigue José Saturnino, de Cotaxtla, con 82 millones de pesos y Lorena Sánchez, de Sayula de Alemán, con 58 millones de pesos. *** Otro caso que llama la atención es San Andrés Tuxtla, que tiene observaciones de probable daño patrimonial por 53 millones 511 mil pesos; le sigue el puerto de Veracruz, con un probable daño de 39 millones 192 mil 679.97 pesos, y Poza Rica, con irregularidades por 24 millones 795 mil pesos. *** El Orfis identificó, además, un probable quebranto financiero por 161 millones 952 mil pesos en dos dependencias estatales (Medio Ambiente, por 3 millones 568 mil pesos, y Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca, con un presunto daño por 2 millones 536 mil pesos) y en 28 organismos públicos descentralizados. *** “Tengo la firme convicción de que la transparencia y la rendición de cuentas fortalecen la democracia, por eso reitero mi compromiso de que en el Orfis seguiremos trabajando con entusiasmo, esfuerzo y dedicación, comprometidos con la calidad de las auditorías que se realizan, siempre en beneficio de la población del Estado de Veracruz con el fin de estimular la participación ciudadana y que ésta contribuya fehacientemente al combate a la corrupción”, expresó la maestra Delia González Cobos, auditora general y titular del Orfis.
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Apenas hace mes y medio, el pasado 18 de agosto, el gobernador Cuitláhuac García presumía los “logros” de su administración al reducir -afirmaba- la incidencia de homicidios dolosos en Veracruz, e invitó a los periodistas a comparar sus números con los que presentan estados que no son gobernador por Morena.
“Se nos olvida la historia que antes teníamos; nosotros hemos estado muy debajo de la media nacional (en homicidios). Invito a que hagan la evaluación de Veracruz comparado con Chihuahua, Jalisco y Guanajuato que en un periodo de tiempo evalúen los homicidios y ustedes mismos hagan sus conclusiones, porque hemos ido bajando de manera radical estos índices que nos dejaron los gobiernos anteriores”.
Y aunque, en efecto, las cifras de esas tres entidades son mucho más altas que Veracruz, no deja de preocupar el repunte sostenido que ha mostrado esta entidad respecto al 2022.
A partir del mes de abril, con excepción de agosto, la entidad veracruzana presenta crecimientos importantes en los casos de homicidios dolosos. En el cuarto mes del año pasado se registraron 77 homicidios, y en el mismo mes de este año fueron reportados 79. En mayo del 2022, fueron también 77 crímenes, contra 83 de mayo del presente año.
Para junio, en el 2022 se reportaron 62 homicidios dolosos, mientras que, en ese mismo mes, pero de este año, la cifra llegó a 74. En julio del año pasado, los homicidios fueron 70, y en este año fueron 73.
Agosto del 2022 tuvo un importante repunte, con 86 crímenes, mientras que este año, en ese mes, fueron 65. Finalmente, en septiembre del año pasado los homicidios fueron 71, contra 79 de este año.
El pasado viernes, en Coatzacoalcos, una persona sin vida fue encontrada en un terreno baldío de la colonia Las Américas. El cuerpo habría sido abandonado ahí durante la madrugada por sujetos a bordo de un taxi.
Y el sábado 30 de septiembre, tres cuerpos sin vida, con huellas de haber sido torturados y con heridas de bala, fueron encontrados en el fondo de un barranco en la localidad Puente Chico, del municipio de Cuitláhuac.
La mañana de este domingo fue encontrado el cadáver de un campesino a orillas de la carretera que conduce a la cabecera municipal de Atzalan.
Al mediodía de este domingo, en la comunidad de Xotla, municipio de Huatusco, fue encontrado un cadáver calcinado. Ciudadanos que pasaban por un lote baldío encontraron el cuerpo. Estas últimas víctimas serán contabilizadas en el mes de octubre.
Si en algunos períodos del año se percibe un descenso de la incidencia de homicidios dolosos, eso no obedece a que el gobierno estatal o las famosas “mesas para la construcción de la paz” estén haciendo algo extraordinario. De pronto los grupos del crimen organizado deciden dirimir sus diferencias en otros puntos del país y enseguida se percibe el cambio, pero en cuanto regresen las confrontaciones en alguna parte de Veracruz, los crímenes volverán a ir al alza.
La estrategia del gobierno estatal ha fracasado por una razón sencilla: muchos de los que deberían combatir a la delincuencia organizada, están coludidos con ellos.
Eso que tantas veces denunció el gobernador, ahora lo tiene en su administración.
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Epílogo.
En momentos en los que Morena cierra filas para respaldar a quienes resulten seleccionados como “coordinadores de la defensa de la 4t” -el eufemismo que significa “candidato”- a lo largo del estado se han desplegado actores políticos para la consolidación de su estructura electoral. *** Es el caso de Martínez de la Torre. En ese municipio y los aledaños, este fin de semana caminó sin descanso el doctor Carlos Gámez Paredes, quien es reconocido por su lealtad a este movimiento y su interlocución con todos los grupos de la zona. *** Con seguridad lo tienen contemplado para retos mayores. *** Manuel Huerta Ladrón de Guevara cumplió su palabra: este fin de semana entregó la oficina de la coordinación de programas sociales del gobierno federal, para estar en condiciones de competir por la candidatura al gobierno estatal. ¿Harán lo mismo sus contrincantes?