Desde hace varios meses se sabe (incluso lo hice patente en esta columna), que en caso de que Claudia Sheinbaum llegue a la presidencia, Cuitláhuac García formará parte de su equipo cercano de trabajo. Es un hecho. No es dato nuevo. Resulta odioso incluso repetirlo.
Lo relevante está en saber dónde lo colocaría la exjefa de la CDMX. De acuerdo a fuentes ubicadas en las oficinas centrales de Morena, el gobernador de Veracruz sería ubicado como secretario del bienestar, de energía (buscando tomarle la estafeta a Nahle), o al frente de la CFE.
Cada uno de los “invitados” al gabinete de Sheinbaum, (en caso, insisto, de llegar al Ejecutivo) tiene cuando menos tres opciones de encargo; en cuanto a García Jiménez existe también una cuarta posibilidad: la secretaría de educación pública.
Y es que de acuerdo a la exjefa de la CDMX, Cuitláhuac García es una “pieza comodín” que podría hacerse cargo tanto de programas sociales como de la educación en el país, pasando incluso hasta por la continuación del trabajo en Dos Bocas, avanzado por Rocío Nahle.
Para el “gabinete de Sheinbaum” también están contemplados al momento (me hacen saber), dos “priístas” de renombre: Alejandro Murat y Alfredo del Mazo, el primero para las secretarías del turismo o bienestar, mientras que el segundo en la titularidad de Pemex.
Cuitláhuac García ya forma parte del equipo de Sheinbaum, sólo le falta esperar que sea justamente quien gane “la grande”. Por eso “su corazoncito” está con ella, como el propio gobernador lo ha manejado públicamente. Veremos qué ocurre.