Este martes, el gobernador Cuitláhuac García ofreció datos sobre el combate a la inseguridad en Veracruz. Dijo que de los 220 días transcurridos en el año, en 24 no se han registrado homicidios dolosos, lo cual consideró como un logro de su administración.

Es algo, agregó, que en los gobiernos anteriores no se había registrado.

Asimismo, el ejecutivo veracruzano abundó que en 2022 se acumularon 39 días sin que se registrada un caso de dicho delito.

Por la declaración de García Jiménez, pareciera que Veracruz está ganando en la lucha contra el crimen; sin embargo, la realidad de la entidad en materia de violencia es mucho más compleja, porque implica que de cada diez días transcurridos en el año, en nueve se registraron al menos un caso de homicidio doloso.

Lo mismo ocurrió en 2022: se acumularon 39 días sin asesinatos dolosos, pero hubo más de 310 días con hechos violentos. ¿Dónde está el logro?

El reporte de la fiscalía estatal, que consigna el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, indica que de enero a junio se registraron en Veracruz 425 homicidios dolosos. Esa cifra es menor a la del promedio de los cinco años anteriores, pero el problema de la violencia parece muy lejos de terminar.

De los 425 homicidios dolosos que se registraron en Veracruz durante el primer semestre del año, 251 corresponden a ataques con arma de fuego, lo cual deja claro el nivel de la violencia en la entidad.

En promedio, cada día del primer semestre de 2023, la fiscalía estatal reportó la integración de 2.3 carpetas de investigación por dicho delito.

Otro dato: entre diciembre de 2018 –cuando inició la presente administración– y junio del presente año, en Veracruz se registraron 5 mil 214 homicidios dolosos.

De mantenerse la tendencia, la presente administración podría acercarse a los 7 mil asesinatos dolosos al concluir su periodo.

Más: en el primer semestre de 2022 se reportaron 432 homicidios dolosos en Veracruz, en tanto que en el mismo periodo del presente año hubo 425; es decir, de enero a junio de este año hubo 7 casos menos que en el primer semestre del año pasado.

Es una reducción, en efecto, pero la diferencia es casi imperceptible.

Eso sin contar con otros delitos de alto impacto, que representan un gran pendiente de Veracruz en temas de inseguridad: por ejemplo, la entidad acumula 351 casos de feminicidio y 558 de secuestro.

En pocas palabras, en promedio, en cada uno de los 55 meses que lleva la actual administración –datos que comprenden de diciembre de 2018 y actualizados a junio del presente año–, Veracruz registró 94.8 homicidios dolosos, 10.1 secuestros y 6.3 feminicidios.

No son cifras para presumir, sobre todo por respeto a las víctimas de los casos de privación ilegal de la libertad; de los asesinatos en razón de género; y de los más de 5 mil 200 homicidios dolosos.

@luisromero85