Se dice que los perros son los mejores amigos del hombre, y es que estos peludos suelen ser una excelente compañía hasta en los días más oscuros: no nos juzgan, nos dan amor, no discriminan y nos dan soporte emocional.

Según el National Institutes of Health (NIH) de Estados Unidos, convivir con perros ha demostrado beneficios para la salud, como la reducción del estrés y la disminución de la presión arterial. Además, diversos estudios respaldan que tener perros puede ayudar a combatir la soledad y mejorar el estado de ánimo.

Por esto y más es que tener un perro como amigo puede ayudar nuestra salud mental y éstas son las razones:

Evitan el sentimiento de soledad

Está comprobado que, tener un perro en casa nos aporta protección y seguridad. Además, los paseos por la calle con un compañero peludo ayudan a estimular el contacto físico y la comunicación con otras personas, así como la conexión con el entorno donde habitamos.

Ayudan a superar la depresión
Uno de los síntomas de depresión es el sentimiento latente de tristeza y vacío; sin embargo, mantener un vínculo con un perro es de gran ayuda para las personas que sufren esta condición, ya que las motiva a levantarse de la cama para atender a la mascota y sacarla a pasear. Incluso si la persona considera que no puede desahogarse con alguien, el lomito podría ser esa ayuda para sacar todo esos sentimientos negativos.

Brindan felicidad

No se puede negar que tener un perro en la vida es sinónimo de felicidad. Jugar con ellos estimula la producción de oxitocina, serotonina y dopamina (hormonas de la felicidad) a la vez que disminuye el cortisol, mejor conocida como la hormona del estrés; en resumen, te hace sentir bien.

Fortalece el valor de responsabilidad

Cuando nos encontramos deprimidos no queremos hacer nada, pero tener un perro es asumir una responsabilidad: bañarlos, alimentarlos, pasearlos, jugar con ellos, todo esto te ayudará a tener una rutina inevitable que con el tiempo mejorará tu estado de ánimo.

Ayudan a mantener activos a los adultos mayores

En el caso de los adultos mayores que viven solos, los perros se convierten en una excelente compañía, reduce el sentimiento de soledad, fomentan la socialización con otros; les ayuda a tener más actividad física y les da un propósito. Para este caso se recomiendan perros de corta edad que les fomenten tener más movilidad durante el día.

Los perros son excelentes amigos que nos brindan no sólo su compañía, sino su amor incondicional, nos hacen sentir alegres y más vivos.

Forbes

Conéctate con Formato7:

LA RATA VENGADORA | Cisneros aprieta; Cuitláhuac no sabe qué hacer con él