Los conciertos de Roger Waters son conocidos por el performance que suele realizar; sin embargo, este no ha sido bien visto por las autoridades de Berlín, quienes abrieron una investigación contra el músico por “incitación al odio”.

Lo anterior, debido a que el intérprete de “Another Brick in the Wall” ofreció un concierto el pasado 17 de mayo en el estadio Mercedes-Benz Arena de la ciudad alemana, en donde lució un polémico atuendo.

El cofundador de Pink Floyd vistió un abrigo negro y un brazalete rojo, similar a los utilizados por la SS nazi, durante una canción en la que asume el rol de un dictador; además, en un momento del tema, comenzó a “disparar” un arma como parte del show.

Del mismo modo, durante el evento proyectó los nombres de diversas víctimas de la violencia estatal, entre las cuales se encuentran Ana Frank, quien murió en el holocausto, y de la periodista palestino-estadounidense Shireen Abu Akleh, que falleció en una operación israelí.

Así, indicaron que Roger Waters estaba haciendo una comparación entre ambas muertes; mientras que el Ministerio de Exteriores israelí acusó al músico de haber “ensuciado el recuerdo de Ana Frank”.

En el espectáculo, también fue posible ver al legendario globo con forma de cerdo, el cual voló por el recinto con “los nombres de empresas armamentísticas”, de acuerdo con la agencia de noticias EFE.

Por todo lo anterior, las autoridades de Berlín comenzaron una investigación contra Roger Waters por “incitar al odio”, ya que su atuendo “es capaz de aprobar, glorificar o justificar el gobierno violento y arbitrario del régimen nazi”, dijo Martin Halweg, el jefe de policía al diario Jewish News.

También señaló que con estos actos “viola la dignidad de las víctimas y, por lo tanto, perturba la paz pública”, de esta manera, luego de que se lleve a cabo la investigación “el caso será remitido a la Fiscalía de Berlín para su evaluación legal”.

Las autoridades de Berlín no han sido las únicas en desacuerdo con las actuaciones de Rogers en Alemania, ya que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel también dejó ver su inconformidad en redes sociales.

Pues publicaron en su cuenta de Twitter: “Buenos días a todos menos a Roger Waters que pasó la noche en Berlín (Sí Berlín) profanando la memoria de Ana Frank y los 6 millones de judíos asesinados en el Holocausto”.

Por su parte, el embajador israelí ante la ONU, Danny Danon comentó: “Waters busca comparar a Israel con los nazis. Es vergonzosamente uno de los mayores enemigos de los judíos de nuestro tiempo”.

Además, el Ayuntamiento de Frankfurt lo ha señalado como “uno de los antisemitas de mayor proyección del mundo” e incluso intentaron cancelar el concierto de Roger Waters programado para el próximo 28 de mayo.

A pesar de ello, y las protestas que se han realizado delante de los conciertos, su actuación se llevará a cabo, ya que un tribunal indicó que no hay indicios de que Rogers haya incurrido en ningún delito penado, de acuerdo con EFE.

Reporte indigo

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