La iglesia católica nombró a mayo como el mes de la mamá, por lo cual el arzobispo de Xalapa, Jorge Carlos Patrón Wong, dedicó la eucaristía de este domingo por las mamás vivas y difuntas que reflejan el amor de Dios.
Durante la homilía dominical y a unos días de celebrar el «Diez de mayo» recordó que la madre ama a sus hijos desde el seno materno y desde antes de nacer y por ello el mejor regalo para las madres vivas y difuntas es la oración.
Pidió orar para que las mamás vivas tengan la fortaleza y el amor que viene de Dios para que tengan la luz del espíritu santo para que las ilumine en todas las decisiones de su familia, su matrimonio y persona.
El religioso pidió que el dolor de la pérdida física no nos impida agradecer a Dios por nuestras mamás difuntas para que nos continúen protegiendo, cuidando y también sigan siendo inspiración porque «todas las cosas buenas que hemos aprendido de las mamás difuntas es para que las revivamos de nuevo».
Patrón Wong también dedicó su mensaje a las madres que han perdido alguno o algunos de sus hijos, para que «esas mamás que sientan en su corazón que sus hijos perdidos físicamente, desde donde está Dios, les agradecen ser mamás y que han dado vida eterna».
AVC