El problema de las desapariciones de personas en Veracruz parece no tener fin. Todos los días, la Comisión Estatal de Búsqueda emite nuevos reportes para la localización de personas y el trabajo de los colectivos es permanente.
Sólo en el periodo comprendido entre el jueves 6 y el sábado 8 de abril, la instancia gubernamental de búsqueda emitió 21 nuevos reportes. Un tercio de los casos registrados en ese lapso de 72 horas corresponde a mujeres.
Esos tres días son claro ejemplo de la magnitud del problema en la entidad.
Todas las desapariciones, sin importar el género, la edad o la condición social, son preocupantes; desde el caso de Karol Andrea Martínez, una adolescente de 16 años desaparecida en Córdoba; o el de Layla Escarleth Martínez, niña de 12 años también desaparecida en ese municipio de la zona centro de la entidad; hasta el de José Luis Ferra, de 52 años, visto por última vez en Boca del Río.
En las últimas horas se reportaron 7 casos de niñas y mujeres desaparecidas en Veracruz; además de las dos mencionadas, se reportó la desaparición, el sábado por la mañana, de Irais Silva, de 29 años, en Fortín, zona centro; de María Fernanda Hernández, de 15 años, en San Andrés Tuxtla; de Brenda Guerrero, de 17, en Papantla; de Mercedes Isabel Falcón, de 61 años, en Córdoba.
Además, también se reportaron desapariciones de dos niños: Rommel Alexander Molina, de 14 años, en Coatzacoalcos; de Joshua Gutiérrez, de 9, en Córdoba.
A esos y a miles de casos más en los últimos años se debe la desesperación de los familiares de las personas desaparecidas y también de los colectivos de búsqueda.
Esa desesperación se vio reflejada hace tres semanas en Xalapa, donde los colectivos llevaron a cabo la “Jornada por Nuestros Desaparecidos” para recordar a personas no localizadas en el mes de marzo en distintos puntos de la entidad veracruzana. Los manifestantes se plantaron en la explanada del parque Benito Juárez, frente a Palacio Municipal y a un costado de Palacio de Gobierno. Exigieron celeridad en las investigaciones y resultados de las tareas de búsqueda.
Eso ocurrió el 16 de marzo; un día después, integrantes de colectivos de búsqueda marcharon del panteón Palo Verde hacia Palacio de Gobierno, en Xalapa, para exigir la aparición con vida de sus familiares desaparecidos.
Clausuraron simbólicamente las oficinas de la Comisión Estatal de Búsqueda, ubicadas en la calle Revolución, zona centro de la capital veracruzana, donde se quejaron del retiro de las fotografías de las personas desaparecidas, que habían colocado en lugares públicos, afuera de oficinas gubernamentales, en Xalapa.
Fabiola Pensado busca a su hijo Argenis Yosimar. La mujer reprochó la falta de acciones para resolver esa y cientos de desapariciones más en Veracruz. Son personas, dijo, que “están esperando que los busquen, ¿por qué les molesta tanto ver el rostro de nuestros hijos desaparecidos?, queremos que haya planes de investigación, no hay planes de investigación para las búsquedas”.
Al corte de diciembre pasado, el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, dependencia de la Secretaría de Gobernación, indica la existencia en Veracruz de 7 mil 437 casos. Un verdadero drama para igual número de familias veracruzanas.
@luisromero85