“Si desea un brazo adicional mientras cocina en la cocina para poder revolver la sopa mientras corta las verduras, es posible que tenga la opción de usar y controlar de forma independiente un brazo robótico adicional”
Investigadores han llegado a la conclusión de que en un corto plazo se podrían diseñar partes robóticas adicionales del cuerpo humano para aumentar nuestras capacidades, ya sea desde un pulgar hasta un brazo extra, bajo el enfoque de aumentar la productividad.
“Si desea un brazo adicional mientras cocina en la cocina para poder revolver la sopa mientras corta las verduras, es posible que tenga la opción de usar y controlar de forma independiente un brazo robótico adicional”, dice Tamar Makin, profesora de neurociencia cognitiva en la unidad de cognición y cerebro MRC de la Universidad de Cambridge.
“Queremos algo que podamos controlar [con mucha] precisión sin que tengamos que articular qué es exactamente lo que queremos”, agregó y sostuvo que el enfoque del equipo se basó en la idea de que los apéndices adicionales podrían usarse para desarrollar las capacidades existentes del cuerpo de una persona.
“Si le falta una extremidad, en lugar de intentar reemplazarla, ¿por qué no aumentamos su mano intacta para permitirle hacer más con ella?”, subrayó, aunque aclaró que el equipo prevé que tales dispositivos también sean utilizados por personas que no viven con discapacidades.
Algunos laboratorios se han centrado en la posibilidad de utilizar electrodos en el cerebro o la médula espinal para controlar dispositivos externos, pero Makin cree que no existe una justificación ética para un enfoque tan invasivo en seres humanos sanos, reseña The Guardian.
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