Lagunas en la Norma Oficial Mexicana (NOM) impiden que marcas de gran tradición y calidad de distintas bebidas etílicas destiladas del agave, sean etiquetadas con el nombre de mezcal, lo cual perjudica al campesino y al campo mexicano.
Esto es lamentable pues en el país existen productos de muy alta calidad, a muy buenos precios y de primera mano del productor, que aunque la NOM no lo apruebe, son mezcales y deben ser etiquetados como tales, para dar confianza al consumidor.
Norma Oficial Mexicana
Carlos López, de “El Tin-Tan Mezcalería”, expresa que se trata de un tema álgido a debatir, ya que la NOM determina que se puede y no se puede etiquetar con este nombre, basada en la denominación de origen protegida, que es una norma internacional que tiene que ver con la propiedad intelectual.
En México fue desarrollada por el Instituto Mexicano de Propiedad Intelectual e internacionalmente por el Organismo Mundial de Propiedad Intelectual.
“Dentro de estos matices tenemos destilados que a veces quedan fuera y que realmente tienen muchísima tradición pero por temas legales no han podido consolidar su producto ni poderlo etiquetar como mezcal, como raicilla, o como bacanora, además de estas denominaciones de origen en México tenemos muchísimas otras que tienen que ver con los destilados de agave”.
Por ello y desde “El Tin-Tan Mezcalería”, se han puesto a investigar y a difundir el tema para que la gente sepa que muchos mezcales en el mercado y que no se pueden llamar como “mezcal”, en realidad si lo son, son de gran calidad y que vale la pena consumirlos.
Campesinos, los más sacrificados
Refiere que lamentablemente esta problemática al que más afecta es al campo mexicano y a los productores mezcaleros, que son los que más sufren y se sacrifican, pues a final de cuentas los comercializadores encuentran los medios para posicionar su producto, pero el campesino se queda relegado en su rancho y no le es permitido salir a ofertar su producto.
“En el caso del tequila todas esas fábricas y tierras que algún tiempo fueron patrimonio mexicano, ahora están en manos de capitales extranjeros, esas tierras las sub-arrendan para que los que alguna vez fueron los dueños las trabajen y terminan con un salario los que alguna vez fueron los propietarios, no nada más de la tierra, sino del capital intelectual de la producción del destilado, eso se busca que no pase con el mezcal y los demás destilados”.
Destilados artesanales, de gran calidad
Izaskun Patrón Pedroza, director de Operaciones de Mezcal de “Casa Maguey”, expresa que junto con Carlos López hacen difusión de los distintos destilados que existen en México, tanto los que están dentro de la NOM, como con los artesanales, estén o no en la NOM.
“Es necesario que la gente conozca y tenga la confianza de adquirir productos artesanales, estén o no dentro de la denominación de origen, ni dentro de las normatividades, pero que conozcan de un buen destilado y adquirirlo”.
Reconoce que México va atrasado en este tema, ya que el mezcal existe desde hace mucho tiempo antes de las normas y gracias al boom de los destilados mexicanos, del tequila y el mezcal, varios estados han retomado su producción, no solamente del agave, y los han empezado a dar a conocer, sin embargo siguen fuera de la denominación de origen y no pueden etiquetarse como debería de ser, “realmente es una laguna que existe en la ley”.
Concluye que la denominación de origen es algo que estamos acostumbrados a que nos de confianza adquirir, pero en el caso de los mezcales podría no ser tan cierto, y es necesario que se apruebe toda la variedad de bebidas que se tienen en el país, ya que hay productos de muy alta calidad, a muy buenos precios y de primera mano del productor.
AVC