Ahora que EL presidente Andrés Manuel López Obrador ha decidido regresar a las calles en una marcha, como desde hace años lo ha hecho para representar las causas más nacionalistas de la historia moderna de México, como sociedad nos toca revalorar esa añeja pero efectiva acción social que es la manifestación en los espacios públicos; estamos de acuerdo con AMLO, sobran razones para marchar.
Y hay que acompañar esta intención del presidente con valor, con fortaleza, con coraje, con responsabilidad, con civismo y educación; dejar a un lado los calificativos, las revanchas; hacer reclamos en favor de los grupos vulnerables, las y los afectados por las malas prácticas en el servicio público que llegaron a costar vidas inocentes, no caer en provocaciones.
Después de la llamada “marcha en defensa del INE” ¿qué sigue?. Aunque no lo quieren aceptar, la respuesta desde el Estado ha sido salir en apoyo a López Obrador el 27 de noviembre y mostrar el músculo de la 4T. Todos los gobernadores morenistas formaditos, ordenados, cada quien con su cuota de ciudadanía, vista como acarreo desde la oposición. Haciendo a un lado el debate, es verdad que sí sobran razones para marchar.
Pongo un ejemplo, el 28 de agosto pasado, el secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela se reunió en Palacio Nacional con padres y madres de niñas y niños diagnosticados con diferentes tipos de cáncer, así como pacientes adultos, donde garantizó el abasto de medicamentos oncológicos y quimioterapias para el resto del año. Una mentira más del gobierno de la 4T.
El desabasto rebasa el contexto del cáncer, pues se ha presentado de manera generalizada en el sistema de salud público en México, y ello ha costado vidas. Según datos del Colectivo Cero Desabasto, tan solo los primeros tres meses del 2022 el IMSS ya había negado más recetas que todas las que se negaron en 2019 o en 2017 y 2018 juntas.
En el INSABI y en el IMSS-Bienestar las cosas no están mejor. Para las unidades rurales y urbanas de primer nivel, durante el primer cuatrimestre de este año, el INDICAS (sistema oficial) reporta el peor nivel de abasto de los últimos 6 años. Razones suficientes para salir a la calle y reclamar con justa razón, pues niñas, niños y adultos han sido víctimas de un gobierno que se ha dedicado a administrar la tragedia, en lugar de resolver.
Estamos tan lejos de Dinamarca y tan cerca de la 4T, la violencia impera, la impunidad más; el crecimiento se basa en dádivas gubernamentales y no en el fomento laboral, la burocracia sigue siendo ese elefante dormido, el pretexto de la austeridad ha dado entrada a charlatanes e ignorantes al servicio público; mientras la retórica es el fentanilo de la política guinda, México necesita una sociedad despierta, participativa y responsable. Sobran razones para marchar, no para adular al Rey del Palacio Nacional.
Los datos compartidos en el texto pueden consultarse en cerodesabasto.org