Veracruz, Ver.- Claudio es un gallo blanco que fue arrojado al interior del panteón municipal de Veracruz hace aproximadamente tres meses, el cual hizo de ese lugar su hogar.
En entrevista, Fredy, uno de los sepultureros del panteón municipal, contó que el gallo llegó con una herida en la tráquea y que incluso le sustrajeron monedas, un listón rojo y semillas.
Los sepultureros presumen que el ejemplar fue utilizado para un ritual por lo hallado en el interior de su tráquea.
Otro sepulturero, que se reservó su nombre, fue el responsable de curar al gallo, el cual se recuperó poco a poco con los cuidados de los trabajadores del panteón municipal, lo que le permitió que se alimentara, se recuperara al paso del tiempo y ahora recorre los pasillos y los cuarteles del cementerio.
“Ahí lo arrojaron por los nichos, andaba todo jodido, le sacaron todo y de ahí le dieron de comer y ya anda al tiro, ya anda por todos lados, aquí se alimenta, tiene como tres meses, es grandote, como esos de rancho (…) Lo tiraron, fueron dos, pero uno no aguantó, primero fue éste, a los ocho días uno rojo, como de pelea, más chico, lo teníamos ahí para alimentarlo, pero no aguantó”, detalló Fredy.
El trabajador comentó que el grupo de sepultureros bautizó como Claudio al ave, el cual se alimenta con maíz e incluso carne.
“Ya está adoptado, ya se quedó, ya tiene sus alimentos, nosotros lo alimentamos, Claudio, así lo bautizaron esta gente, come maíz, come de todo, hasta carne, salió carnívoro el gallo ese”, agregó.
La administración del panteón municipal colocó una aviso para recomendar a los visitantes que no intenten levarse a Claudio, ya que pertenece a ese lugar.
“Por eso está el anuncio ahí para que no se lo lleven porque quién sabe qué tenga, está bonito, está recuperado, estaba bien flaquito, jodido”, finalizó el sepulturero.
AVC/José Juan García
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TEXTO Y CONTEXTO | No hay altar que alcance para tanta muerte en Veracruz