Con una misa en catedral y la develación del altar de muertos, la Asociación de Periodistas de Veracruz recordó a los comunicadores fallecidos.
En punto de las 8 de la mañana, en la catedral de la ciudad de Veracruz se dió la misa donde se pidió por el eterno descanso de los comunicadores que han fallecido en diversas circunstancias.

Posteriormente se develó el altar de muertos al interior de El estribo del hotel diligencias, donde se expusieron 48 fotografías de los comunicadores que dedicaron su vida informar sobre el acontecer diario en el puerto.

En entrevista, Rodolfo Herrera, presidente de la APV, explico que se trata en su mayoría de comunicadores que fallecieron por causas naturales, algunos otros por enfermedad, otros más por trágicos accidentes y otros por hechos de violencia.

En el desayuno con periodistas activos, se recordó que el «Día de los fieles difuntos» es para recordar a todos los fallecidos, independientemente de las circunstancias en que se hayan ido y se pidió por su eterno descanso.

Los periodistas ausentes mencionados durante la misa y recordados en el altar de muertos son: Guillermo Wong Saavedra, Manuel de Jesús Carvallo, Ricardo Rubín, Enrique Huerta, Andrés Cortés, Antonio Montenegro, Miguel Ángel López Velasco, Yolanda Ordaz, Abel García Urbina, Sergio Moreno Celis, Antonio Velasco, Manuel Pulido, Alejandro Aguirre, Martín Lara Reyna, Jorge Contreras, Socorro Abry, Celia Rosado, Bernabe Martínez Segura, Mario Díaz, Norberto Olivares, Alfonso Valencia Ríos, Raymundo Zúñiga, Susana Herrera, Soledad Ricarte, Aida Villalobos, José Pérez de León, Jesús Triana, Henri Tijerino, Carlos Tijerino, Carlos Pérez Viveros, Antonio Martínez, José Cabrera Ávila, Jorge Gómez, Esperanza Moncada, Héctor «el Conde» Larios, Pascual Hernández, Santiago Quintal, Primitivo López, José Luis Gamboa Arenas, Aracely Puga, Arlet Montejo, Manuel Rosero, Gabriel Huge, Juan Mendoza, Fausto Fernández Ponte, Miguel Santos «Guechy», Enrique Huerta, Jorge Gómez, Toño Armenta, Francisco Barragán y Rodolfo Trigos.

Los comunicadores indicaron que aunque son tiempos difíciles, la labor informativa no se detiene y ha estado presente en la historia de la humanidad.