Si en política no hay coincidencias –una frase muy usada por los viejos priistas–, entonces cómo debe interpretarse el fulminante veto que la Fuerzas Armadas acaban de ejercer en contra de Manelich Castilla, quien no alcanzó a cobrar ni su primera quincena como flamante secretario de Seguridad Pública del estado de Quintana Roo.
Sin explicar los motivos, el viernes pasado, cuatro días después de haber asumido el cargo, Castilla Craviotto fue removido por la gobernadora Mara Lezama. Sin embargo, a la mandataria de la alianza MORENA-PVEM le concedieron designar al Contralmirante Rubén Oyarvide Pedrero, en cuya administración municipal como alcaldesa de Benito Juárez (Cancún) había colaborado con ella como secretario de Seguridad Pública y Tránsito.
El sorpresivo veto de la Sedena al yucateco Manelich desató morbosas especulaciones pues en los círculos políticos y periodísticos de Quintana Roo lo consideraban recomendado de la presidenciable Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, y de su jefe policiaco Omar García Harfuch, con quien Castilla Craviotto se formó en la extinta Policía Federal (PF).
Y es que para la escritora y periodista Anabel Hernández, especialista en temas de corrupción policiaca y narcotráfico, Manelich Castilla es un personaje clave en el deslinde que García Harfuch ha pretendido hacer de su presunta responsabilidad durante la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en Iguala, Guerrero, en septiembre de 2014.
Según la reportera, la declaración del entonces funcionario de la PF, como otros documentos, exhiben una protección negligente hacia el actual secretario de Seguridad de la Ciudad de México. En enero del año pasado Hernández publicó que “Juan”, un testigo colaborador, había declarado en febrero de 2020 que cuando García Harfuch era Coordinador de la PF en Guerrero, recibía un soborno mensual de 200 mil dólares por parte del grupo criminal Guerreros Unidos, facción ligada al Cártel de Los Beltrán Leyva.
En enero de 2021, Infobae México consultó el oficio PF/DSR/CEG/2724/2014 mediante el cual García Harfuch le informa al entonces comisionario general, Manelich Castilla, sobre una supuesta comisión para realizar “actividades de carácter confidencial” en el estado de Michoacán, aunque no detalla quién le ordenó ese traslado.
En enero de 2021, Infobae México consultó el oficio PF/DSR/CEG/2724/2014 mediante el cual García Harfuch le informa al entonces comisionario general, Manelich Castilla, sobre una supuesta comisión para realizar “actividades de carácter confidencial” en el estado de Michoacán, aunque no detalla quién le ordenó ese traslado.
“La investigación que he realizado sobre dicho escrito de comisión a Michoacán, todo indica que es apócrifo. El único oficio válido y oficial de comisión en esa época dado al ahora jefe de la policía de la CDMX está firmado el 23 de octubre de 2014 por el titular de la PF, Enrique Galindo, en el que lo comisiona a la División de Gendarmería en la Ciudad de México”, sostuvo Anabel Hernández, quien ha insistido en que hay elementos suficientes para acreditar que el actual jefe de la policía de la capital era titular y jefe de todos los policías que participaron en el ataque a los normalistas, y que, además, recibió los reportes en tiempo real de los hechos y giró órdenes.
La autora del libro “La verdadera noche de Iguala”, refirió que otro punto relevante es que, en su comparecencia, la FGR solo le hizo cinco preguntas, en las que García Harfuch señaló que conocía de la “problemática” focalizada en esa región de Guerrero y su relación con el entonces presidente municipal José Luis Abarca, en clara concordancia con la llamada “verdad histórica” del ex procurador Jesús Murillo Karam, actualmente en prisión. Sobre Guerreros Unidos comentó que sí sabía de su existencia y que personal a su cargo había detenido a mil tres presuntos integrantes de esa organización criminal. En cuanto a Los Rojos, mencionó que había logrado la detención de al menos cinco cabecillas, proporcionando nombres y alias.
“Ahora que (Luis Antonio) Dorantes (Macías, ex titular de la Policía Federal en la estación de Iguala) es el primer PF detenido por el caso de los 43, ¿García Harfuch seguirá protegido?”, publicó en enero del año pasado la periodista en su columna Contracorriente para el medio alemán Deustche Welle, afirmaciones que ni el secretario ni la dependencia que encabeza respondieron para deslindarse o explicar.
Sin embargo, el de Manelich Castilla no fue el único veto de la Sedena. En Tamaulipas también obligaron al flamante gobernador Américo Villarreal Anaya, de MORENA, a dar marcha atrás al nombramiento anunciado cinco días atrás de Oscar Alberto Aparicio Avendaño, otro ex policía federal y ex titular de Seguridad en Tulum, Quintana Roo. Al frente de la SSP quedó el General Sergio Hernando Chávez García, quien estaba en el Estado de México.
En respuesta, la Sedena envió este mismo sábado 467 elementos, 63 vehículos y cuatro binomios caninos para reforzar la seguridad y combatir el crimen organizado en esa entidad fronteriza.
Pero, en el estado de Hidalgo, García Harfuch sí logró imponer a su ex director de Asuntos Internos, Salvador Cruz Neri, como secretario de Seguridad Pública pese a que organizaciones feministas y civiles le advirtieron al gobernador hidalguense Julio Menchaca, también de MORENA, que el recomendado del jefe policiaco de Sheinbaum tenía por lo menos 10 denuncias de abuso sexual, entre ellas una interpuesta en 2011 ante la Fiscalía de Querétaro por intento de feminicidio por su expareja Margarita “N”, una suboficial de la PF.
¿Cómo se puede explicar esto?
Juan de Dios Sánchez Abreu, delegado estatal de AMECOPE
Este sábado 1 de octubre, en las instalaciones de un conocido hotel ubicado en la avenida Lázaro Cárdenas casi esquina con Araucarias, en la ciudad de Xalapa, el dirigente nacional de la Asociación Mexicana de Comunicadores y Periodistas (AMECOPE), Omar Quezada Vielma, le tomó protesta a Juan de Dios Sánchez Abreu como representante de la Delegación Veracruz.
Este evento, al que asistieron periodistas de diversas regiones del estado, los cuales recibieron sus nombramientos como delegados distritales y municipales de la AMECOPE, contó con la presencia también del recién galardonado Doctor Honoris Causa, José Pablo Robles Martínez, editor del Diario del Istmo e Imagen de Veracruz, y de la doctora Rosy Lorena Laureano Meza, directora de la Facultad de Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la Universidad Veracruzana (UV), quien firmó un convenio para ofrecer cursos y talleres que contribuyan a la profesionalización y actualización de los miembros de esta organización periodística.
Acompañaron a Sánchez Abreu la vicepresidenta estatal Valeria Marcial; Manuel Rivera, delegado por Xalapa; José Luis Utrera, delegado regional en la zona sur; Tomás del Ángel, director nacional de relaciones públicas, y Berenice Castillo, directora del portal Primero Cardel y Delegada Municipal por Puente Nacional.