San Diego. El Departamento de Justicia desclasificó en California la orden de detención original que emitió hace 35 años un gran jurado contra Rafael Caro Quintero.

Estados Unidos pidió originalmente la detención con fines de extradición del narcotraficante mexicano recapturado este mes por crímenes y asesinatos.

En Los Ángeles, un gran jurado pidió detener a Rafael Caro Quintero por delitos violentos con ayuda del crimen organizado y por ser quien organizó, instigó y asistió en el secuestro, tortura y muerte del agente espacial antinarcóticos Enrique Kiki Camarena Salazar, en 1985.

Basado en una revisión de la solicitud del gobierno para abrir la orden de arresto, se ha demostrado una buena causa para solicitarlo. Por lo tanto, se concede la solicitud sobre la orden de detención del demandado Rafael Caro Quintero”, escribió el magistrado John Krostadt al desclasificar o hacer pública la orden de detención.

El documento original lo había firmado el magistrado Venetta Tossopolus.

Estados Unidos tiene actualmente dos casos abiertos contra el fundador del Cártel de Guadalajara, uno en el este de Nueva York, por delitos de narcotráfico entre la década de los años 80 y 2020, y la de narcotraficante homicida por lo que se pide su extradición a California.

La disponibilidad de la orden de detención ocurre luego de que funcionarios de los gabinetes de Estados Unidos y México han manifestado decisión de buscar la pronta extradición de Rafael Caro Quintero a California.

El narcotraficante fue recapturado el 15 de julio y los fiscales de los dos países y el canciller mexicano reafirmaron su compromiso de buscar una rápida extradición, ante la suspensión temporal de su entrega que ordenó un tribunal federal en México.

La primera vez que Caro Quintero fue arrestado fue en 1985 en Costa Rica. Tras cumplir 28 de los 40 años de sentencia en prisión, el narcotraficante salió libre en 2013, cuando un juez determinó que su caso debió seguirlo una corte estatal y no una federal.

El gobierno de Estados Unidos acusa que Caro Quintero había continuado operaciones de narcotráfico durante sus años en prisión y luego, cuando fue liberado erróneamente.

Este mes, efectivos de la Marina Armada de México lo encontraron en una zona montañosa de Sinaloa y lo trasladaron a una prisión de alta seguridad; Estados Unidos adelantó que pediría su inmediata extradición, pero una corte detuvo ese proceso.

Por encima de una disputa sobre la participación o no de la Administración para el Control de Drogas (DEA) en la recaptura de Caro Quintero el 15 de julio, los dos gobiernos ahora se enfocan en cumplir la extradición que se pidió hace tres décadas y media en Los Ángeles, la división a la que perteneció el agente Enrique Camarena.

Buscan frenar su extradición

El narcotraficante Rafael Caro Quintero interpuso una nueva demanda de amparo en contra la solicitud de extradición que pesa en su contra por parte del gobierno de Estados Unidos al considerarlo sospechoso del asesinato del agente antinarcóticos Enrique Kiki Camarena, perpetrado en 1985.

La demanda fue admitida a trámite por el Juzgado Primero de Distrito en Materia de Amparo y Juicios Federales con sede en el Estado de México, tribunal que otorgó una suspensión provisional que impide que el capo sea trasladado a otro país, si es que no media un juicio de extradición.

En días pasados, Caro Quintero obtuvo una suspensión de plano también con el propósito de no ser entregado de manera inmediata a los Estados Unidos, beneficio que fue concedido entonces por un juzgado en Jalisco.

Excélsior

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