Las ofertas de verano son una tradición. Desde Julio Regalado, de Soriana, hasta los Summerdays, de Walmart, los pisos de ventas de las tiendas se llenan de carteles de 3×2 y, en algunos casos, ventas a meses sin intereses, sobre todo en productos como electrodomésticos, electrónica y tecnología.
La Comer, Chedraui, Walmart y Soriana han venido lidiando con algunos obstáculos para poner los carteles en el rojo de las ofertas y descuentos desde 2020 con el estallido de la pandemia. Pero este año el entorno es aun más adverso a causa de la inflación, que no ha dado tregua desde finales del año pasado, y que en la primera quincena de junio se ubicó en 7.88%.
Por ahora, las cadenas han logrado sortear las alzas en la inflación, al menos en sus ingresos. Las ventas de las tiendas que integran la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), que tienen más de un año en operación (conocidas como tiendas iguales), mostraron un crecimiento de 11.3% en mayo contra el mismo mes del año pasado.
En las unidades abiertas en los últimos 12 meses, el incremento en la facturación es de 13.6%, respecto al mismo mes de 2021. Con este resultado, las asociadas a la ANTAD hilan tres meses con un nivel de facturación por arriba de 2019, en un contexto que las sigue poniendo a prueba, ahora por los aumentos generalizados en los precios de los productos.
Con este antecedente, se espera que esta temporada de ofertas logre dar un empujón a las ventas de las cadenas durante el tercer trimestre de este año. “Esperamos un crecimiento relativamente fuerte en ventas, un dígito alto, o en una de esas hasta doble dígito, aunque mucho va a ser generado por crecimiento en precios”, dice Carlos Hermosillo, analista bursátil independiente.
Las ofertas son una oportunidad para que las compañías desplieguen las mercancías que tienen en sus anaqueles y, de acuerdo con los especialistas consultados, las promociones en los autoservicios se orientarán más en las promociones por volumen, es decir, las ventas al 3×2.
Julián Fernández, jefe de análisis de Bursamétrica, comenta que estas temporadas también dan un aire a los bolsillos de los compradores, que aumentan su consumo en casa debido a que están en el hogar o salen de vacaciones, sobre todo en productos que tienen una próxima fecha de caducidad, sin que haya un impacto negativo por el alza de precios,
“El efecto inflacionario es un punto muy importante en este tema de las ofertas; sin embargo, en México aunque la inflación es alta, no ha empeorado, y la población va a estar buscando ofertas no solo de canasta básica, sino de bebida alcohólicas, aunque la canasta básica detona en estas promociones”, dijo el analista.
¿Qué esperar de las ofertas?
Desde el inicio de la pandemia las empresas han estado lidiando con cierres en algunos puertos logísticos y el aumento en el precio de los contenedores marítimos para el traslado de mercancías, lo que ha generado la escasez y encarecimiento de las mercancías. Vicente Yañez, quien preside la ANTAD, estima que los precios de los productos podrán comenzar a bajar hasta que se descongestionen los puertos de China, lo cual tomará meses.
Sin embargo, los analistas proyectan que en el caso de las ofertas de verano, están descontados los problemas con la logística, sobre todo porque las ofertas están orientadas a los productos que ya están en los almacenes. Aunque en el futuro, los precios sí podrían verse afectados.
“El efecto inflacionario en el stock no es problema y por ahora se pudieron mantener ofertas; como se espera que los precios estén al alza, esta podría ser la última temporada con porcentajes de descuento bajos”, dice.
Aunque la mayoría de las ofertas se esperan en 3×2, también se esperan meses sin intereses, pero, de acuerdo con Carlos Hermosillo, esto será más en las tiendas departamentales, como Liverpool, Palacio de Hierro y Sears. “La banca está más cuidadosa con su cartera, pero los brazos financieros de las tiendas tienen que buscar espacio para crecer y a la vez fidelizar al cliente”, señala.
Mara Echeverría/Expansión MX