En 1989, Acción Nacional obtuvo su primera candidatura, Baja California, con Ernesto Ruffo Appel a la cabeza y su mayor auge de gobiernos locales lo logró hasta antes de las elecciones de 2018, cuando sumaba 12 entidades.
Actualmente, gobierna Guanajuato, Chihuahua, Querétaro y Yucatán, en tanto que en las elecciones del domingo pasado, retuvo Aguascalientes y Durango (en coalición con el PRI y PRD), lo que representa menos del 50% de las gubernaturas de su máximo histórico.
El panismo vivió su mayor fuerza hasta antes de los comicios de 2018, antes de la jornada electoral administraba 12 entidades, pero en 2022 solo tendrá cuatro estados de forma independiente y dos más en alianza.
Para quien fuera el primer gobernador panista que rompió con la hegemonía del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en los gobiernos locales, Ruffo Appel, es un hecho que el blanquiazul requiere de un profundo análisis interno que le permitan regresar a los orígenes del partido, “a su ADN”.
El también exdiputado federal que en más de una ocasión ha dejado claro que no reconoce la dirigencia nacional de Marko Cortés e incluso lo ha llamado a que renuncie, considera que es momento de que el partido haga un “corte de caja” profundo porque, de lo contrario, ya no habrá trabajo ni para los que lo siguen.
Esto es, el resultado de las elecciones de este domingo en las que Acción Nacional redujo el número de gubernaturas debe ser un motivo de un puntual análisis de sus dirigentes, principalmente de Marko Cortés.
Le urge al PAN retomar el rumbo
-El rumbo que está tomando el partido, ¿es el correcto? – se le preguntó a Ruffo Appel.
-Está en la coyuntura de que si toma la dirección apropiada -que para mí es abrirse al público-, recuperaría la posición de confianza y podría significar una ruta de esperanza hacia la construcción de la institucionalidad nacional – respondió.
-¿Esto quiere decir que los grupos al interior del PAN deben dejar sus diferencias y fortalecer al partido?
-Sí, los distintos grupos ya están de alguna forma considerándolo, porque la perspectiva de ganar elecciones donde ellos pululan y quieren estar, pues ya son más magras. El recuento de la elección de las gubernaturas de ayer es claro: de seis en disputa solo se ganaron dos.
Lo anterior, toda vez que de las seis contiendas en juego, Morena se llevó Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas, mientras que la coalición PAN, PRI, PRD, se quedó con dos: Aguascalientes y Durango.
Entonces, añade el exlegislador, “el escenario de en qué van a vivir ese montón de panistas que se quedan fuera (de algún cargo) debe de obligarlos a reflexionar y encontrar una forma más congruente, más abierta, más competitiva y más leal de aquello que aspiran y que esto se logre por la ruta del esfuerzo y no de la componenda”.
Marko debe permitir la renovación de la dirigencia
-¿Marko debe mantenerse en el cargo o debe dar paso a una renovación de la dirigencia nacional?
-Dentro de los procesos jurídicos del PAN, hasta después de 2024 el partido deberá renovar la dirigencia. Así que Marko tiene un mandato claro.
Pero, añadió Ruffo, “sí por su propia voluntad dice: ‘me retiro y provoco entonces que se dé una renovación’, sin duda sería una decisión muy interesante”.
“Yo personalmente no reconozco a Marko Cortés (como dirigente nacional) porque me sé no solo sus historias sino las he podido comprobar. Sin embargo, no me ocupo de andarlo denostando porque no veo el caso”, agregó el también exsenador.
Ernesto Ruffo recuerda que en la Legislatura anterior confrontó al michoacano: “Me paré en medio del Grupo Parlamentario y le dije a Marko Cortés, enfrente de todos, que yo no lo reconocía (como dirigente nacional). Los demás se quedaron callados”.
“De tal suerte que tiene uno que luchar contra toda esa inercia, pero está en las manos de Marko Cortés el recapacitar y volver a conducir al partido a la verdadera institucionalidad y estar al servicio del compromiso genético del PAN, ser herramienta de México para que los mejores hombres y mujeres encarnen la Ley”, expuso Ruffo.
Discurso, no una realidad, celebración de triunfos
Más como un discurso es una realidad electoral el que Acción Nacional celebrara los triunfos de Aguascalientes y Durango, cuando en los hechos Morena se quedó con Hidalgo, Oaxaca Quintana Roo y Tamaulipas, aseguró Marco Antonio Baños Martínez, exconsejero del Instituto Nacional Electoral (INE).
“El PAN mantiene Aguascalientes que es un reducto que había tenido, las encuestas no se equivocaron. Hay una diferencia importante de poco más de 20 puntos en favor de Tere Jiménez, de la alianza PAN, PRI, PRD, en relación a la candidata de Morena y aliados, Nora Ruvalcaba”, dijo.
Además, añadió, “pierde Tamaulipas que era un bastión importante donde parece que la estrategia que siguió el gobernador Javier García Cabeza de Vaca en torno al crimen organizado había funcionado más o menos, pero al final de cuentas se pierde”.
“Pero con muchas dudas en relación a la posible participación del crimen organizado que según se ve en diversas declaraciones de actores políticos, tuvo un papel relevante en esa entidad y en otras”, añadió en entrevista el también académico.
Baños Martínez estimó que al final de cuentas el panismo conserva Aguascalientes y deberá compartir Durango con el tricolor y los perredistas.
Desde su visión, no solo el PAN sino los demás partidos políticos deberán hacer una revisión interna de cara a los comicios del 2023 cuando estén en disputa los estados de México y Coahuila, así como en el 2024 , cuando se renueva la presidencia de la República.
“Y si bien el PAN no podrá la gubernatura que se disputará en el 2023, léase Estado de México y Coahuila, es un hecho que tendrá que ponerse de acuerdo con el PRI, porque en Durango jugaron con una candidatura de coalición impulsada por el tricolor pese a que el gobernador era del PAN, en el caso de José Rosas Aispuro”, expuso.
Aunado a ello, consideró que el blanquiazul debe cohesionarse internamente para poder afrontar los retos electorales en puerta, porque actualmente “el PAN está dividido, estructuralmente son dos grupos. Marko Cortés no ha logrado conservar la unidad dentro del partido y son temas que se tendría que trabajar para afrontar el 23 y luego las elecciones del 24”.
-¿La tarea en este momento es aglutinar al partido?
-Tiene que cohesionarse. El PAN está fracturado, es evidente. No es casual que algunas figuras del PAN están migrando a Movimiento Ciudadano, que en esa materia pareciera ser el ganón. MC gobierna dos estados importantes: Jalisco y Nuevo León, pero si los partidos de la oposición no corrigen un conjunto de estrategias y no cohesionan a sus integrantes destacados, a las corrientes que los conforman, difícilmente tendrán posibilidades en las elecciones del 23 y en las del 24”.
Datos PAN
El partido fundando en 1939 logró su primera gubernatura en 1989 bajo la figura de Ernesto Ruffo Appel.
En 2012 fue la elección en la que ganó su mayor número de gubernaturas (7 de las 12 en disputa, mientras que en 2017 alcanzó su mayor número de entidades bajo su dominio: 11).
Durante la llamada Cuarta Transformación, ha registrado una disminución paulatina de gubernaturas, dado que en 2018 perdió Puebla y Baja California; en 2021, Baja California Sur y Nayarit, mientras que en la contienda de este domingo 5 de junio, Quintana Roo y Tamaulipas.
Un dato relevante es que 2017 a 2022, la oposición ha perdido 24 gubernaturas:
En 2017, PAN, PRI y PRD gobernaban 32 entidades. En 2022, PAN, PRI, PRD, gobiernan 8.
Actualmente la distribución de la gubernatura es la siguiente: Morena 20; PAN 5; PRI 3; MC 2; PVEM 1, y PES 1.