En la consulta de revocación de mandato del domingo, en Chiapas, Tabasco, Veracruz y Guerrero hubo casillas en las que se contaron más votos que los esperados conforme el listado nominal y urnas en las que se registró una participación atípica de hasta el 99% de los ciudadanos de una misma sección electoral.
Los cuatro estados son gobernados por políticos de Morena y están entre las entidades que más votaron a nivel nacional a favor de “ratificar” al presidente Andrés Manuel López Obrador. La mayoría de las anomalías ocurrió en distritos rurales.
El caso más notorio sucedió en Chiapas, donde hubo 26 casillas con hasta el 101% de la votación, es decir, que recibieron más sufragios que los previstos en el listado nominal, especialmente en los distritos 2 de Bochil y 10 de Villaflores, aunque también hubo casos en el Distrito 11 de Las Margaritas, el 3 de Ocosingo, el 4 de Pichucalco y el 8 de Comitán de Domínguez, municipios con una fuerte presencia de comunidades indígenas.
Consejeros del INE explicaron a Animal Político que una posible explicación del exceso de votos en las casillas es que se permitió a los representantes de partidos políticos (siete titulares y siete suplentes) emitir su sufragio en las urnas que les tocó vigilar. Es decir, pudo haber hasta 14 votos extra.
Solo Morena registró representantes en el 99.4% de las casillas, mientras que el PAN cubrió el 22.3%; el PRI y PRD no acreditaron a ningún representante. Esto significa que no hubo una sola casilla en la que todos los partidos estuvieran representados, por lo que no era factible que se utilizaran las 14 papeletas adicionales, menos aún en numerosas urnas de un mismo distrito electoral, como sucedió en Chiapas, estado gobernado por Rutilio Escandón.
Participación “atípica”
Gobernado por Cuitláhuac García, en Veracruz, en el Distrito 1 de Pánuco, hubo una votación del 101% en la casilla básica de la sección electoral 2895, donde se podían recibir mil 280 sufragios, pero votaron mil 294 personas.
En los distritos 14 de Minatitlán, 17 de Cosamaloapan y 20 de Cosoleacaque, además del de Pánuco, hubo 21 urnas con entre el 80% y el 99% de participación ciudadana.
Ayer, en conferencia de prensa, el presidente del INE, Lorenzo Córdova, consideró que esas cifras de participación son “atípicas”, debido a que la media nacional fue de alrededor del 17% del listado nominal. Córdova puso como ejemplos, precisamente, a Bochil y Villaflores.
“Hay algunos distritos que llaman la atención, distritos que son eminentemente rurales”, comentó. “No dije que haya irregularidades; el INE defiende y vigila los votos; llama la atención porque el promedio es 17% y hay distritos que tienen más de la participación; seguramente mi respuesta como funcionario electoral es: ‘Pues en esos distritos quiso votar más la gente’”.
Consejeros y asesores del INE consultados por este medio señalaron que las anomalías observadas en casillas de Chiapas, Tabasco, Veracruz y Guerrero obedecieron, precisamente, a la ausencia de vigilancia por parte de otros partidos.
Señalaron que el exceso de votos en urnas y la atípica participación ciudadana pudieron deberse a actos de acarreo o de “embarazo” de urnas, mediante el uso ilícito de credenciales para votar.
Los funcionarios electorales precisaron que, aunque se trata de votaciones extrañas, ya fueron validadas en primera instancia por los consejos distritales, y solo podrían indagarse presuntas irregularidades si algún partido impugna los cómputos. Añadieron que también la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales (FEDE) tiene la facultad para investigar posibles ilícitos.
AVC