La mañana de este lunes se congregaron comunicadores y periodistas en el centro de la ciudad para exigir a los gobiernos nacional, estatal y municipal el cese del hostigamiento, la violencia y desapariciones contra el gremio, pues aseguraron que actualmente los periodistas “enfrentan la peor crisis de violencia desde el 2017”.
Con pancartas en donde podía leerse “Basta de agredir al mensajero” y “No al abuso del gobierno del estado para silenciar”, los periodistas se pronunciaron contra la inactividad de las fiscalías nacionales y estatales que continúan sin resolver los más de 150 asesinatos de periodistas ocurridos desde 2000, 30 de ellos ocurridos durante la actual administración del presidente López Obrador.
“Dichas agresiones son perpetradas principalmente por el gobierno, coludido con el crimen organizado, en un claro esfuerzo de callar las voces de quienes nos dedicamos a labor informativa y comunicativa” explicó al respecto Ana Laura Pérez Mendoza, expresidenta de la Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas (CEAPP).
Pérez Mendoza recordó que el pasado 25 de enero se efectuó una movilización en 65 ciudades del país para sumarse a las exigencias de justicia para los periodistas asesinados y desaparecidos, pero precisó que es necesario exigir no solamente cuando ocurre un hecho de violencia, pues la falta de derechos laborales de los periodistas son también otra forma de frenar la labor periodística.
Gobernantes no pueden promover violencia contra periodistas
“Es urgente que cese la violencia contra la prensa, misma que el presidente Andrés Manuel López Obrador y otros gobernantes promueve, como lo vimos en el lamentable hecho de violencia protagonizado por el gobernador Cuitláhuac García Jiménez”, declararon los periodistas durante la lectura de un posicionamiento.
Lo anterior debido a que el pasado viernes durante la conferencia de prensa del gobernador, donde García Jiménez hostigó a una periodista a quien cuestionó por “abogar por los delincuentes”, actitud hostil que aseguran los comunicadores, no es la primera ocasión en que se presenta.
“Desde las tribunas, los políticos incitan un discurso de odio contra los medios y sus trabajadores, que solamente hacen su trabajo de recopilar información para sus audiencias. No somos enemigos del estado y exigimos garantías para ejercer nuestra labor”.
AVC