Maratónica gira de trabajo tuvo el secretario de Educación, Zenyazen Escobar García, quien durante los cincos días de aplicación de la vacuna de refuerzo contra el COVID-19 al magisterio, recorrió las sedes, que el Gobierno de Cuitláhuac García Jiménez dispuso en los municipios de Orizaba, Boca del Río, Xalapa, Martínez de la Torre, Tantoyuca, Pánuco, Poza Rica, Tuxpan, Papantla, Cosamaloapan y Coatzacoalcos, para constatar el orden y agilidad de atención por parte de brigadistas de salud, voluntariado y personal de la Secretaría de Educación de Veracruz.

Sin duda, cerrar en el sur del estado fue un gran acierto del funcionario morenista pues pudo observar la respuesta favorable de las maestras y los maestros, así como medir el pulso de la percepción que tienen los veracruzanos de esa región hacia el trabajo que la Secretaría de Educación estatal ha realizado a 37 meses de iniciada la actual administración.

Y no por un tema de interés político, sino porque no se puede negar que Escobar García escucha a las bases, atiende y resuelve; no como antaño que a duras penas la gente de a pie podía acercarse al supuesto servidor público y aquellos que lo permitían, lo hacían para mostrarse ante los medios dándose un baño de pueblo sin responder a sus peticiones.

Ahora definitivamente no es así, la bondad del trabajo educativo y el estar en una dependencia como la Secretaría de Educación de Veracruz, la cual llega a los puntos más recónditos de la geografía estatal, permite que el titular pueda estar atento a las necesidades del magisterio y de las comunidades educativas; docentes, madres, padres y estudiantes siempre encuentran la disposición de Escobar García de escucharlos, sobre todo en temas sensibles, como ha sido todo lo que ha girado en torno a la pandemia, como es la vacunación.

Al grito de «Zenyazen, tengo una solicitud», el también profesor detiene su recorrido para atender a quien se acerca con alguna petición, porque sus visitas no sólo son de supervisión, también quiere escuchar las inquietudes de los docentes, como debe ser y como él constantemente dice: porque es un compañero maestro y aliado.

Por eso fue tan importante para él acudir a sedes a lo largo y ancho del estado. Durante cinco días el cansancio, el frío, el calor, las horas de viaje por carretera, desvelos y desmañanadas fueron lo de menos, porque al final pudo entregar excelentes cuentas: más de 130 mil maestras, maestros y trabajadores de la educación recibieron sus dosis de refuerzo de Moderna. Se dice fácil, pero implicó un gran trabajo logístico, colaborativo y de liderazgo.

Cosamaloapan y Coatzacoalcos fueron los últimos puntos de su gira, agradeció la respuesta de las y los maestros y los exhortó a continuar demostrando el gran compromiso social que tienen con las niñas, los niños y la juventud veracruzana, siendo la vacunación una importante muestra de su interés por cuidar su salud y de quienes lo rodean, ante el regreso a clases presenciales.

Escobar García, sabe que su presencia vale, el encargo que tiene es de los más valiosos dentro de un gobierno, tan sólo tiene sobre sus hombros el aprendizaje de más de dos millones de niñas, niños y jóvenes. A estas alturas, la gran mayoría de los veracruzanos saben quién es, su trayectoria, el respeto que se ha ganado, que cumple y que siempre está para quien le pide ayuda. Una figura de peso, que cada día sigue creciendo y viéndose de tal forma que semana a semana sigue destacando con su nombre y trabajo dentro del gabinete del gobernador Cuitláhuac García Jiménez.

Con su trabajo, refuerza y confirma el mensaje del presidente Andrés Manuel López Obrador ocupado por la igualdad, dejando claro que de norte a sur, de este a oeste, la lucha por la educación sigue, cueste lo que cueste.