En medio de las ruinas de la antigua fábrica textil San Bruno, sobre una alfombra de pasto sintético desgastada, sin luz, sin agua, y sin sanitarios, pero con ánimos de divertirse y practicar algún deporte, cada fin de semana llegan familias a convivir y adolescentes para “echarse una cascarita de futcho”.
Éste es el único espacio deportivo sin costo alguno al público al que tienen acceso los adolescentes y jóvenes del barrio de San Bruno, colonias cómo Desarrollo Social, Fernando Gutiérrez Barrios, no hay otro más según cuentan los asistentes.
Según los jóvenes que jugaban futbol, al lugar asisten por semana un promedio de 500 personas en diferentes horarios, días, y espacios, pero cuando terminan de hacer el deporte se marchan del lugar para dar el lugar a los siguientes grupos.
“Por pandemia no nos quedamos, nos vamos luego” explicaron.
Las personas que ahí se encontraban lamentaron que en el barrio de San Bruno en el que habitan cientos de familias no hay más espacios deportivos en la zona para la recreación de los niños, niñas y adolescentes, sin que les cobren.
“Desafortunadamente no hay otro lugar dónde hacer deporte, había antes un campo en la escuela de la colonia Desarrollo Social, pero según iban a hacer una escuela y adiós al campo de futbol, y ahora ni escuela, ni campo de futbol. Tiene 10 años que según iban a construir la escuela y no hicieron nada. Tenemos el Fovissste pero también está lleno de chavos” expusieron.
La antigua fábrica de textil, San Bruno comprende tres hectáreas, el espacio fue embargado por el Sistema de Administración Tributaria (SAT), y mientras el gobierno federal define que hará con el lugar, los chavos ocupan apenas un área de 200 metros cuadrados para su recreación.
Uno de los árbitros de futbol, Mauricio Salazar Cruz informó que a diversas administraciones municipales y del gobierno del estado han solicitado que se rescate del SAT y lo conviertan en un centro cultural y deportivo, pero ninguno ha atendido el llamado.
“Yo llevó futbol, pero aquí hay lucha libre, lucha olímpica, box, Muay Thai, aquí se hace adiestramiento de perros, y también juegan rugby que tenemos la fortuna de decir que tenemos un chavo que va a ir a la selección nacional de rugby”, dijo Mauricio.
Refirió que se han formado comités ciudadanos para hablar con autoridades del SAT en México, pero tampoco hay respuesta positiva, y mientras tanto la ex fábrica ha sido el espacio deportivo del Barrio de San Bruno.
“Queremos ver si podemos tener una reunión con la nueva autoridad (presidente municipal de Xalapa, Ricardo Ahued Bardahuil) a ver qué podemos hacer, aquí todos los días hay chavos que viene a hacer deporte, a echarse su cascarita”, mencionó el árbitro.
Por las noches también acuden jóvenes a jugar futbol, así que entre Mauricio y la comerciante de golosinas y refrescos, Reyna Hernández se cooperaron y compraron una planta de luz, a fin de dar el servicio a los asistentes.
“Aquí hay mucho espacio para el deporte, si quieren Voleibol hay espacio para voli, ahorita estamos tratando de rescatar un espacio allá abajo para poner una cancha de basquetbol, pero los trabajos de limpieza lo hacemos la gente, aquí nadie de gobierno nos ayuda” informó el árbitro y trabajador de la construcción.
Antes había borrachos, se le quedó mala fama, ahora es deporte
El promotor de futbol indicó que en décadas anteriores la antigua fabrica era ocupada por grupos de hombres para ingerir bebidas alcohólicas, pero las familias y los jóvenes han hecho mayor presencia, y si se presentan “borrachos” les piden amablemente que abandonen el lugar, pero si no atienden el llamado, solicitan a elementos de la Dirección de Seguridad Ciudad municipal que los saquen.
“Anteriormente había otros señores trabajando aquí en la fábrica. A esta hora ya hubiera encontrado borrachos aquí, borrachos allá, ahorita ya es normal que en un campo de futbol se echen una cervecita, no estamos en desacuerdo, pero hasta cierta cantidad, pero si se ponen rebeldes tenemos número directo con la policía municipal” finalizó.
AVC/Verónica Huerta