Si nos han leído durante mucho tiempo aquí o si son adictos a cazar ofertas en nuevos modelos de smartphones seguramente ya lo habrán notado: los teléfonos inteligentes chinos fabricados por Xiaomi a veces son ridículamente baratos considerando el grado de especificaciones técnicas que tienen algunos modelos.
Lo acabamos de comprobar hace unos pocos días con la revelación de la familia Xiaomi 12. Una gama de terminales con procesadores Qualcomm Snapdragon 8 Gen 1 y un brutal sensor fotográfico Sony IMX 707. Eso sin contar su memoria RAM, la batería enorme y su almacenamiento interno. Todo por un precio que parte de los USD $580 aproximadamente.
Es muy probable que durante todo el año se hayan preguntado cómo es que Xiaomi vende teléfonos así a un precio tan atractivo, sobre todo si se compara por ejemplo con el costo habitual de un iPhone.
Xiaomi y su fórmula secreta
En el negocio de la fabricación y venta de smartphones existen dos ejes cruciales que marcan la diferencia entre lograr ganancias o quedarse corto para abandonar el mercado, como le sucedió a LG: el volumen de producción y los márgenes de ganancia por cada unidad vendida.
Es así como Apple por ejemplo adopta una estrategia donde produce una variedad limitada de modelos de teléfonos inteligentes para cada generación a un volumen más delimitado, con un costo de producción más alto pero también con un precio de venta al público más alto.
De modo que los chicos de Cupertino tendrían un margen de ganancia de entre el 36 y 37% por cada iPhone vendido. Esto significa que fabricar, distribuir, promocionar y vender un iPhone cuesta en realidad casi la mitad de lo que el consumidor termina pagando, y el resto del dinero se va directo al balance financiero positivo de Apple.
En contraste, Xiaomi, según reportan los amigos de GizChina, cuenta una gama amplia y variada de unidades de todos los rangos, su volumen de producción es masivo y al final sus márgenes de ganancia rondan apenas entre el 8 y 9% por cada unidad vendida.
Al final la apuesta con el fabricante chino se enfocaría en el volumen de unidades, bajo la intención de que existan muchos usuarios consumiendo dispositivos de esta marca.
De manera que la cifra acumulada de personas haría que ese 9% representara una suma de dinero tan alta como la lograda por marcas que optan por otro modelo de negocios.
En conclusión: no hay mejor, ni peor, y el mejor smartphone es el que se acomode más al perfil de cada usuario.
FayerWayer