El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE) pidió a sus unidades médicas alistarse para reconvertir sus unidades y disponer de más camas para hospitalizaciones conforme avanza la cuarta ola de Covid-19, la cual está cobrando fuerza con la variante Ómicron.
«El número de casos esperado es muy alto y debido a este incremento y al volumen de población en nuestro País, se espera que el número de hospitalizaciones se vea incrementado de manera exponencial.
«Por lo anterior, se les solicita de la manera más atenta preparar sus unidades médicas para una posible conversión e incremento en el número de camas disponibles para atención de estos pacientes conforme avance la cuarta ola en sus entidades federativas», indica el oficio fechado ayer y firmado por Ramiro López Elizalde, director Normativo de Salud.
De acuerdo con el documento, la nueva variante tiene una velocidad de transmisión mayor que las anteriores y provocará un mayor número de casos leves, con manifestaciones clínicas bronquiales en lugar de pulmonares.
«Se traducirá en un incremento de las consultas ambulatorias de primer y segundo nivel de atención de medicina familiar, por lo que se deberá reforzar la atención en las áreas TRIAGE para el correcto diagnóstico y derivación de los pacientes a donde correspondan», precisó.
Para el virólogo Andreu Comas, del Consorcio Mexicano de Vigilancia Genómica, el llamado de las autoridades de salud debió lanzarse desde noviembre, junto con un reforzamiento de las políticas de control.
«La tardanza ha implicado que por un lado hayan llegado a territorio mexicano miles y miles de personas con Covid-19 y sobre todo con la variante Ómicron, y por el otro que esas miles de personas que están llegando todos los días a Baja California Sur, Quintana Roo, Yucatán, Ciudad de México, Estado de México, estén generando casos que se van a dispersar en las principales ciudades del País», señaló.
El especialista advirtió que México es un territorio libre para entrar con el virus SARS-CoV-2 y sin vacuna.
«Ese es el mayor crimen de la actualidad de la pandemia en nuestro País, que en México puede entrar cualquiera con Covid y sin vacuna», afirmó.
La Reforma