De no haber sido por la presión que ejercieron el líder del Senado, Ricardo Monreal, y presuntamente hasta la secretaria de Energía, Rocío Nahle, los seis jóvenes xalapeños que desde el 3 de septiembre pasado permanecían en prisión acusados por el delito de moda “ultrajes a la autoridad”, difícilmente habrían salido del reclusorio de Pacho Viejo tras obtener este lunes 13 el amparo de la justicia federal.
También intervinieron en este caso la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y los colegios, barras y asociaciones de abogados, pero al parecer fue la intercesión de Monreal y Nahle –ambos zacatecanos, por cierto– la que logró que los hermanos Manuel Alejandro “N” y Luis Francisco “N”, Brian Alberto “N”, Juvencio “N”, Lorenzo “N” y José Leonardo “N” recuperaran su libertad.
Según trascendió, habría sido el propio líder del Senado quien en lo personal se comprometió ante los familiares de los jóvenes a interceder ante el Poder Judicial de la Federación, pero recomendándoles que buscaran también el apoyo de la titular de la Sener para que abogara ante sus aliados del gobierno de Veracruz, lo cual hicieron unos parientes cercanos que desde hace años son contratistas de Pemex y que actualmente tienen relación con la aspirante más fuerte de Morena a la gubernatura del estado.
Sin embargo, aunque los jóvenes ya están libres, ahora habría que preguntar si van a proceder penalmente contra los abusivos policías que los detuvieron en forma arbitraria, falseando los hechos.
Y es que tal como lo había denunciado públicamente ya el senador Monreal, de acuerdo con los videos de la plaza comercial ubicada frente a la Central de Autobuses de Xalapa (CAXA), en ningún momento se ve que amenacen a policías con armas punzocortantes como acusaron los uniformados.
En dichas grabaciones se observa que a las 19:39 horas dos jóvenes son interceptados por tres policías estatales. Detrás de ellos llegan dos hombres más, quienes también son revisados, e intercambian algunas palabras con los uniformados; segundos después, un joven de playera negra aparece hablando por celular y al fondo otros dos se acercan.
En otro video, a las 19:40 horas se ve a policías revisando a los jóvenes, levantándoles la playera y las bolsas de los pantalones.
A las 19:42 uno de los jóvenes platica con los policías y otros dos lo escuchan; uno más se encuentra cerca de un barandal y junto a él permanece un uniformado.
Un minuto después se puede apreciar a seis jóvenes dialogando con los elementos policiacos. A las 19:44 permanecen hablando con los policías al tiempo que otras personas atraviesan el lugar y, en las imágenes, a las 19:45, aparecen únicamente a los hombres con los policías.
De acuerdo con las imágenes obtenidas en la plaza comercial, alrededor de las 19:46 horas los jóvenes continuaban en el lugar, mientras uno de los elementos policiacos portaba un arma cerca del barandal.
A las 19:47 horas se puede ver en las imágenes a refuerzos policiacos; en la escena se aprecian alrededor de seis elementos, mientras que tres de los jóvenes se mantienen en comunicación con las autoridades.
A las 19:51 se juntan policías y los muchachos, cuando un elemento somete a uno de los hombres, vuelven a revisar dentro de sus bolsillos y posteriormente se los llevan, aparentemente esposados, con los brazos atrás y sin que éstos pongan resistencia.
¿Habrá consecuencias legales por este ultraje a la ciudadanía?
Acerca de este deleznable abuso, el gobernador Cuitláhuac García declaró que se revisaría este delito que actualmente se penaliza en 14 entidades del país; sin embargo, en Veracruz, tiene la mayor condena, pues de acuerdo con el artículo 331 del Código Penal se establece una sentencia que va de seis meses a seis años de prisión al que cometa agravio o amenace a la autoridad en ejercicio de sus funciones. Además, si se cometen cuatro supuestos, la penalidad será de cinco a siete años, por lo que amerita prisión preventiva
Agradecimientos
Desde este espacio quiero agradecer a los amigos, compañeros y lectores por sus felicitaciones con motivo del Premio Nacional de Periodismo que por segunda ocasión me entregó, en 19 años, el Club de Periodistas de México A.C.
A todos muchas gracias por su reconocimiento, camaradería y amistad.