Menudo coraje pegó Ricardo Monreal cuando Adán Augusto López le comunicó, -en su calidad de Secretario de Gobernación -, que el Presidente no asistiría al Senado para atestiguar la entrega de la medalla Belisario Domínguez. “Pero yo me encargaré de cabildear con las Senadoras para que se moderen”, insistió el zacatecano. Aún así, no hubo cambio de parecer.
Y es que en realidad, aprovechando que (históricamente) a López Obrador no le gusta asistir a los recintos legislativos, el “súper Secretario” se colgó del incidente con la Senadora Lilly Téllez para evitar que Monreal destacará como “conciliador”, siempre y cuando todo saliera bien en la Cámara Alta.
La información que Adán Augusto López comunicó a su paisano (y Presidente) era sencilla: había posibilidades de que cuatro Senadoras panistas le hicieran “tragar amargo” en el recinto. “Las legisladoras Lilly Téllez, Kenia López, Martha Cecilia Márquez y Xóchitl Gálvez te pueden increpar, sugiero no asistas, aunque vayan a premiar a tu amiga Ifigenia (Martínez)”.
“Pero ahí está Ricardo, ¿no crees que podría evitarlo? Me gustaría acompañar a Ifigenia, y aunque ya no esté físicamente, a Manuel (Velasco Suárez), fueron mis propuestas para la Medalla”, dijo AMLO. “Mejor no te arriesgues”, replicó su paisano, y acto seguido, levantó el teléfono para comunicárselo a Monreal.
El movimiento del Secretario de Gobernación fue una jugada “a dos bandas” que le permitía, por un lado, quedar bien con su amigo, (alejándolo de la lumbre opositora en el Senado), y por otro, evitar que Monreal pudiera colocarse una estrella más en la frente en su camino hacia el 2024.
Me hacen saber que, más tarde, Monreal pidió hablar directamente con el Presidente, sin que estuviera Adán Augusto López en el sitio, pero no pudo hacer gran cosa, la operación para que AMLO no asistiera al Senado se había concretado. “Quieren faltarme al respeto, Ricardo, y no les haré el caldo gordo”, fueron las palabras del Ejecutivo, me comentan.
La única vez que AMLO ha estado como Presidente en alguna de las Cámaras, fue cuando tomó protesta al cargo, nada más, y no pretende ir en lo que resta de su mandato. Lograr que a pesar de las presuntas condiciones adversas, (y de su conocida aversión por las legislaturas), el tabasqueño asistiera al Senado, habría sido “oro molido” para Monreal, cosa que el súper Secretario no estaba dispuesto a permitir… y no permitió.