Por: Tere G. Quintero
Después de más de dos años de tocar puertas en instituciones oficiales, el Instituto Metropolitano del Agua del Municipio de Veracruz, accedió reconsiderar las altas tarifas que cobra EL Grupo MAS a los habitantes del puerto jarocho, anunció el ingeniero Oliver Olmos Cabrera, dirigente del Movimiento Civil Independiente.
Tras una larga reunión con los integrantes del IMA, el ingeniero Olmos Cabrera señaló que fue una estira y afloja para que los concesionarios del Grupo MAS y el órgano que representa los intereses del pueblo accedieran a lo que por obligación tienen de ofrecer servicios y tarifas del vital líquido que sean accesibles al bolsillo de los veracruzanos, tal como lo marca el Artículo 4º Constitucional.
El dirigente de MOCI agregó que será a partir del próximo viernes cuando empiece la mesa de propuestas de la empresa MAS al usuario del servicio del agua, analizando caso por caso para ir resolviendo de acuerdo a los escenarios particulares de cada uno de los que han sido afectados por el cobro indebido de la empresa extranjera.
Por su parte, Silas Reséndiz Márquez integrante del MOCI indicó que alguien le vendió la oferta al Grupo MAS de que el agua era un filón de oro y que en Veracruz todos vivían con una gran solvencia económica, pero la triste realidad es que mucha población se ha quedado sin empleo y la mayoría son personas jubiladas con una pensión que apenas alcanza para comer y que la defienden y defenderán a un a costa de su propia vida
Asimismo, el ingeniero Eduardo Canudas Lara, también integrante de MOCI manifestó que, aunque ya se entabló el diálogo entre IMA y Grupo MAS, la lucha seguirá hasta lograr la cancelación de la concesión, porque el servicio del agua y drenaje debe ser prestado por la administración municipal y no por empresas particulares y mucho menos extranjeras.
Tras estas declaraciones el centenar de ciudadanos veracruzanos que se encontraban a las afueras del local que ocupa las oficinas del Instituto Metropolitano de Agua, Oliver Olmos Cabrera fue ovacionado con gritos y aplausos al enterarse de que la lucha que han entablado con la empresa brasileña Grupo MAS, por fin se verá consolidada y su economía ya no será dañada como hasta la fecha lo ha hecho esta empresa dependiente de Odebrecht.