Hace algunos años, Televisa transmitió un programa de concursos cuyo premio principal consistía en que el participante que había ganado una serie de etapas previas, tenía la posibilidad de entrar a una cápsula donde se encontraban billetes reales en medio de cientos de billetes de fantasía. Una vez adentro, la cápsula se envolvía de aire en forma de remolino; el juego consistía en tratar de recuperar la mayor cantidad de dinero de verdad en sólo un minuto.

La desesperación por atrapar el dinero real y el sueño frustrado del concursante eran el epicentro de la diversión de los televidentes. Era una entretenida y malévola catarsis de la pobreza. Hoy con los tianguis del Bienestar, López Obrador quiere hacer lo mismo.

El Presidente anunció el viernes pasado la operación de algo llamado Tianguis del Bienestar, un proyecto en el que se entregarán de manera gratuita, a las 70 poblaciones más pobres del país, algunos de los bienes y recursos que han sido confiscados o decomisados en las aduanas.

El mecanismo será precisamente como el juego de concurso: la gente podrá elegir, durante 20 minutos, las cosas que necesita o simplemente, que se quiera llevar regaladas, principalmente ropa, calzado, juguetes, herramientas y utensilios para el hogar que hoy se encuentran almacenados en las bodegas del SAT.

En un gobierno donde el Ejército construye aeropuertos y la Secretaría del Bienestar es responsable de la estrategia de vacunación, ahora la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Rosa Icela Rodríguez, fue quien informó que la semana pasada ya se realizó el primer tianguis en Atlamajalcingo del Monte, uno de los diez municipios contemplados en Guerrero.

En el caso de Veracruz serán cinco los municipios a donde se llevará la ‘cápsula de la esperanza’ o tianguis del Bienestar. Será a través de carteles y perifoneo como se informará a los pobladores de esos lugares para que acudan a los Tianguis del Bienestar y adquieran artículos nuevos. De paso, el gobierno podrá prescindir de más de 70 bodegas, almacenes e inmuebles, cuya renta de alquiler representa anualmente mil 147 millones de pesos.

¿Y qué pasará si los obsequios no alcanzan? ¿Si asisten personas de otros municipios o familias enteras para multiplicar la ganancia? ¿Qué pasará cuando el artículo que se llevó una persona era pretendida por otra y esto genera disturbios? ¿Qué hará una persona con una TV de 60 pulgadas pero que no tiene luz eléctrica en su casa? ¡Lastimaaaa Margarito!

El Presidente nunca aprendió el arte de gobernar pero es un maestro en el arte de la mentira y la distracción. Sabe que a millones de mexicanos en la pobreza -3.5 más de los que él recibió al iniciar su gobierno- lo único que les queda es la esperanza. Por eso la cultiva con esmero, con el fertilizante del engaño.

¿Qué sigue? ¿Qué catafixien sus regalos? El propósito no es erradicar la pobreza, sólo entretenernos con ella.

EU repite en Afganistán la vergonzosa derrota de Vietnam

Creíamos que las históricas imágenes del salto del vacío de personas atrapadas en las Torres Gemelas de Nueva York a punto a colapsarse no tendrían parangón en la historia. Nos equivocamos.

En su desesperación por el retorno del gobierno Talibán, algunos afganos decidieron aferrarse al fuselaje de un avión que trasladaba a los últimos norteamericanos que quedaban en Afganistán tras casi dos décadas de ocupación. A los pocos minutos, encontraron de lo que huían: una muerte segura. Las escenas son dramáticas, nunca antes vistas.

Biden podría haber perdido de manera anticipada cualquier intento de reelección, además de poner a su país nuevamente en el objetivo del estado Talibán que logró en una semana lo que los norteamericanos no pudieron en 20 años, desde aquél septiembre negro del 2001.

Es cierto que Biden hizo lo que quería la mayoría de los estadunidenses: salir de Afganistán y terminar con la guerra. Sin embargo, la forma en que sucedió exhibió a un gobierno militarmente débil, incapaz de devolver la paz a aquél país y garantizar su seguridad nacional. El objetivo no era matar a Bin Laden, sino terminar con el terrorismo. Fracasaron de la misma forma que en Vietnam.

Estados Unidos ha dejado en la indefensión a miles de afganos y ciudadanos de otros países que durante estos años ayudaron a las tropas occidentales. Las soldados no se retiraron, simplemente huyeron ante el avance del estado Talibán. Con el control total de los talibanes, debemos estar preparados para ver el horror de la venganza. La guerra no terminó, apenas empieza.

Las del estribo…

1. En el Hospital General de Veracruz han muerto 21 enfermeras y 19 más están contagiadas; en la clínica del IMSS en Poza Rica una persona murió esperando un espacio. Mientras, la gente abarrota antros, fiestas populares y festejos familiares. Después de año y medio, ¿quién tiene más responsabilidad, el gobierno o la gente que decide jugar todos los días a la ruleta rusa?

2. Este martes, aspirante a la rectoría de la Universidad Veracruzana, Ana Beatriz Lira Rocas, quien posee uno de los currículos más sólidos de entre los candidatos, se reunirá con periodistas del Grupo de los Diez. Interesante charla de quien podría ser la segunda mujer en ocupar la rectoría.